La trama de la fiscalización de Milei: manuales, trucos, el call center de Marra y las dudas en el PRO
La misma tarde del jueves en que Cristina Fernández de Kirchner proclamaba en el Congreso el balotaje entre Sergio Massa y Javier Milei, los encargados de la fiscalización del libertario mantenían una reunión con dirigentes del PRO para definir el esquema del 19 de noviembre para todo el país. En paralelo, a 700 kilómetros de Buenos Aires, en el local de La Libertad Avanza en el barrio de Nueva Córdoba de Córdoba capital, un grupo de voluntarios recibía la capacitación correspondiente para ser fiscales. Entre ellos estaba Gabriel, 36 años, pareja y dos hijos, comerciante y emprendedor independiente, que se ofreció para custodiar sus votos en el mismo colegio donde cursó la secundaria. Va a ser la primera vez en su vida y ya le avisaron que será ad honorem.
“El primer objetivo es sacar al kirchnerismo. Massa es más de lo mismo”, argumenta Gabriel, que pidió a elDiarioAR reservar su apellido. Ya votó a Milei en las PASO y en las generales. “Buscamos cambiar las mismas políticas de siempre: que no entra nada al país, que siendo comerciante cuando tengo que reponer ya perdí plata, la incertidumbre, el dólar que sube, los productos que no entran, la inseguridad, y la educación y la salud que están para atrás. Milei es un tipo del cual comparto ideas, obviamente no todas, pero gran parte sí. No cagó a nadie por ahora, así que lo veo con buenos ojos”, abunda en sus porqués.
La LLA cordobesa ya negocia para la fiscalización con el PRO –como parte del acuerdo que sellaron Milei y Mauricio Macri–, pero dicen que “esperan” también que haya de su lado tropa de Juan Schiaretti y radicales díscolos. En el schiarettismo negaron esa posibilidad a elDiarioAR y en Juntos por el Cambio aclararon que formalmente solo actúa el partido amarillo. Las diputadas nacionales Soher El Sukaria y Laura Rodríguez Machado son la contraparte del PRO mediterráneo de los libertarios Gabriel Bornoroni y Gonzalo Roca: ellos están a cargo del operativo en la segunda provincia más importante del país, donde justamente Massa irá a la caza de votos este lunes.
Para organizar el operativo ya circula internamente un PDF con una radiografía de los fiscales que necesitan para cubrir toda la provincia: 10.576 personas. Lo llamativo del documento es que en la tapa aparecen juntos los logos del PRO y de LLA. En una de sus páginas se aclara que la recepción de fiscales amarillos es “en zonas donde LLA solicita”.
“Que no se nos escape la elección por ahí”
Milei se tomó en serio la fiscalización para el balotaje. “Estamos intentando mejorar para que no se nos escape la elección por ahí”, le dijo el diputado a elDiarioAR y otros medios el jueves, al salir de la Asamblea Legislativa del Congreso. En gran parte por eso aceptó “sin condiciones” la ayuda del PRO. Espera duplicar los 100.000 fiscales de mesa –más unos 30.000 que actuaron por escuelas– que movilizó para las generales.
En LLA admiten que necesitan reforzar más que nada en el conurbano bonaerense y en las provincias del norte del país, los motores del repunte electoral de Massa. Ese mapa se terminó de puntear en la reunión del jueves que compartieron los responsables libertarios y amarillos: por Milei están Guillermo Ferraro y Sebastián Pareja –los encargados a nivel nacional–, pero también suenan como espadas del operativo Guillermo Francos –el potencial ministro de Interior mileísta– y hasta Eduardo Bastitta como aportante clave para la logística territorial –es el fundador de Plaza Logística y uno de los empresarios “dolarizadores” del libertario–.
Por el PRO están a cargo a nivel nacional la bullrichista Paula Bertol y el senador José Torello –amigo de Macri–. Otros dirigentes opositores involucrados por su expertise en territorio bonaerense son Guillermo Sánchez Sterli –que estuvo a cargo de la fiscalización de JxC en la provincia y responde a Cristian Ritondo–, Juan Pablo Arenaza –mano derecha de Patricia Bullrich– y Sebastián García de Luca –ex jefe de campaña de la candidata cambiemita–.
Pese a la centralidad mediática que tomó Macri en estos días, en el PRO hay coincidencias de voces en que “la campaña es de Milei”. “Nosotros estamos para dar una mano, no para encargarnos. La fiscalización es de ellos”, aseguró una fuente al tanto de esas reuniones sobre el operativo para el balotaje. “Queremos que ganen”, fue uno de los mensajes que le transmitió Bertol a sus ahora socios mileístas en esas mesas que comenzaron el lunes en un coworking porteño.
“Lo que estamos haciendo ahora es empujar el lápiz”, explicó una voz dentro del operativo de fiscalización de Milei. En estos días se hizo un cruce de datos para establecer los puntos en el mapa donde hubo “debilidades” de LLA y “fortalezas” del PRO. También se habilitó una nueva página web para recibir voluntarios y se desplegó un operativo de “contención”: en una de las oficinas de Bull Market, la financiera de la familia Marra, se armó un call center: Un grupo de jóvenes contacta a las personas que se anotaron para fiscalizar el 22 de octubre y los compromete a repetir la custodia en el balotaje. Expertos en la materia afirmaron que el día de la elección suelen “bajarse” un diez por ciento de los anotados.
Los fiscales libertarios que ya participaron de las capacitaciones recibieron dos instructivos: un manual de 17 páginas con detalles sobre la tarea y una guía rápida de apenas una hoja. En el documento más largo, la “bienvenida” tiene tono político: “Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre. Por eso, el primer paso es agradecer a cada lector por sumar un granito de arena en la reconstrucción de nuestra querida Nación”. Luego se deja en claro la intención del instructivo: “Lo que La Libertad Avanza espera de sus fiscales es que garanticen la reposición de boletas durante todo el día y que luego del recuento aporten un certificado de escrutinio por mesa correctamente completado y firmado”, se lee.
En el paso a paso de cómo se debe fiscalizar –siempre en línea con el reglamento electoral, sin ninguna mención a la palabra “fraude” como intentaron instalar los libertarios estos días públicamente, aunque nunca en la Justicia– se aporta un “truquito” clave para la custodia de los votos: “Cuando llegues a la mesa, preguntá quién es el presidente de mesa y su suplente e identificá a los distintos fiscales partidarios que estén o que vayan llegando. La primera silla más próxima a la puerta del cuarto oscuro será para el presidente de mesa, la segunda para su suplente (si lo hubiera) y luego se colocan los fiscales, te recomendamos reservar con algún abrigo o pertenencia siempre la tercera silla que es la más próxima a las autoridades de mesa”.
Provincias, dinero y milanesas
Aunque el operativo entre LLA y el PRO está en marcha, todavía está en proceso de “bajar a tierra”, según pudo reconstruir elDiarioAR en consulta con referentes de al menos seis provincias distintas. Este viernes hubo un primer Zoom desde el macrismo porteño con el interior del país. “Aún no nos pidieron nada, pero es un montón lo que se necesita”, afirmó una fuente cordobesa del PRO.
En Santiago del Estero el PRO está dispuesto a poner en marcha las casi 3.000 personas que se necesitan, siempre y cuando no participen los libertarios. “La gente de Milei desapareció en las elecciones generales o algunos fueron comprados fácilmente por el gobernador Gerardo Zamora”, denunció a este medio un referente macrista.
Hay incógnita en Santa Fe, la tercera provincia en importancia, que tiene su propia complejidad porque el gobernador electo Maximiliano Pullaro es de la UCR de Martín Lousteau, su vice Gisela Scaglia responde a Horacio Rodríguez Larreta –que rechazó el pacto con Milei– y Macri tiene como alfil al diputado Federico Angelini. “Aún no hay nada armado. El PRO en Santa Fe está muy particionado. Es difícil tener una postura única”, aseguró una encumbrada voz amarilla de la provincia.
Tampoco comenzó el operativo en otras provincias que va a manejar la oposición desde el 10 de diciembre, como San Luis –con Claudio Poggi– o San Juan –con Marcelo Orrego–. “A mí todavía no me llamó nadie”, afirmó el encargado puntano de haber fiscalizado tanto a Poggi como a Bullrich y Larreta. Una explicación subterránea de porqué los diez mandatarios opositores no quieren jugar explícitamente es que quieren evitar quedar “pegados” a Milei. Entrarían en un conflicto si el que finalmente gana es Massa, con quien tendrían que negociar en la Casa Rosada.
Una excepción es el radical Alfredo Cornejo, gobernador electo por Mendoza, que llamó a que JxC “fiscalice” para “evitar el fraude”, aunque cuestionó por igual a Milei y Massa. Sí llamó a fiscalizar por el libertario Luis Petri, también radical mendocino y ex compañero de fórmula de Bullrich. LLA además tiene en la provincia cuyana el apoyo de Omar de Marchi, ex armador federal de Larreta y quien disputó contra Cornejo la provincia.
El mayor operativo conjunto será en Buenos Aires, que entre el conurbano y el interior representa el 37% de los electores nacionales. La trama tiene ribetes llamativos. Un diputado radical con mucho recorrido en la pampa bonaerense afirmó que habrá intendentes de la UCR –el partido ostenta una treintena de municipios– que van a fiscalizar para Milei, pese a que el partido rompió con Macri. La razón tiene su lógica: “Lo hacen para tener una garantía a futuro: si gana Milei no quieren que su operador local se agrande para que el día de mañana busque disputarle el municipio”.
Con dimensiones de una provincia, La Matanza será el principal campo de batalla del conurbano porque fue el bastión de la victoria de Massa. Tiene más de un millón de votantes, lo que significan unos 4000 fiscales. Los operadores de Milei son la pareja Luis Ontiveros y Lorena Ramos, y tienen como contraparte del PRO al diputado Alejandro Finocchiaro y al concejal Lalo Creuse.
La discusión ahí es por plata: ¿quién va a financiar a los fiscales? En las elecciones pasadas cobraron unos $10.000 por jornada, valor similar al que paga la Justicia Electoral a cada autoridad de mesa. “Tengo mil personas para movilizar, pero me tienen que asegurar que va a estar la plata antes”, recogió elDiarioAR de uno de los dirigentes opositores más encumbrados. La misma fuente recordó que en octubre tuvo que sacar “de su bolsillo” dinero hasta para pagar a cocineras que fríen las milanesas de los sándwiches que se entregaron como vianda. Si tiene que “bancar” él a los fiscales, son $10 millones de “inversión”. Por eso advirtió: “Yo le fiscalizo todo lo que quiera a Milei, pero no pongo un mango”.
MC/VDM/DTC
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