La Sexta Pata de los “crímenes verdaderos”, un podcast de True Crime desde Mar del Plata hasta Spotify

El “True Crime” es un género que está cada vez más de moda porque acompaña la cuota de morbo con la que carga la sociedad. “True Crime” en español significa “crímenes verdaderos” y de eso se trata: la historia de la humanidad cuenta con un montón de crímenes terroríficos, tan exuberantes que parecen de ficción. Sin embargo, son verdaderos y los creadores de contenido de True Crime se encargan de especificar los detalles más insólitos y pesadillezcos de cada uno de los crímenes que ocurrieron en las distintas partes del mundo.

Hay series, libros, películas y podcasts de True Crime. En Youtube, por ejemplo, Damián Kuc lanzó un programa llamado “Historias innecesarias”, el cual se caracteriza por incluir muchos relatos de True Crime, entre ellos el caso de las dos niñas fallecidas en el ItalPark, el caso de María Marta Belsunce, el atentado a la Amia, entre otras tragedias de Argentina y otras partes del mundo.

Son historias innecesarias, sin embargo pareciera que con cuanto más dolor y atrocidad carguen, más interesante se vuelve para los consumidores de True Crime.

La Sexta Pata es un podcast de True Crime creado por Cherry y Pisandro, dos amigos que viven juntos en la ciudad de Mar del Plata. Relajados e impulsados por la obsesión y las ganas de compartirse el uno al otro el conocimiento sobre el tema, Cherry y Pisandro han conversado sobre los crímenes más sangrientos, enredados y desconocidos. De esta forma, han vuelto productivas las horas “gastadas” viajando por la Internet en busca de satisfacer el deseo del saber.

Al ser dos amigos que viven juntos, la tensión que genera el True Crime para algunos oyentes se calma cuando hablan sobre series, otros amigos y anécdotas graciosas. Los fanáticos de La Sexta Pata sin dudas eligen reproducir este podcast en busca de historias espeluznantes, pero también son muchos los que se encariñaron con los conductores, que a medida que avanzan las temporadas dialogan más y, de esa forma, se dejan conocer ante el público que los sigue.

Tanto es así que La Sexta Pata tiene un Lado A, donde se dedican a difundir True Crime; y un Lado B, dedicado a lo bizarro, a los caprichos, a lo que ellos quieran. Por ejemplo, hay un episodio del Lado B dedicado a la salida del clóset de ambos conductores y a sus primeros pasos reconociéndose como parte del mundo LGBTIQ+.

Tanto Cherry como Pisandro reconocen su obsesión por el True Crime y la dinámica del podcast es que uno le cuenta un crimen que, al menos desde el punto de vista radial, el otro desconoce. Entonces, tanto Cherry como Pisandro se ponen a la par del oyente que escucha y desconoce la historia que el otro le acerca.

La Sexta Pata es la demostración de que con un micrófono, un deseo y una obsesión se puede hacer un podcast y encontrar un público que quiera escuchar aquello que se comunica. Tanto es así que han creado el “Club La Sexta Pata”, el cual logra que el podcast esté bancado económicamente por sus fanáticos. A cambio de una suscripción mensual, desde $200, los miembros del club pueden tener decisión sobre cuáles serán los próximos casos a tratar y también les da la posibilidad de participar del podcast enviando preguntas en secciones específicas.

JP