Menem cedió ante la UCR y aceptó discutir el financiamiento a las universidades para salvar la sesión en Diputados

La nota formal llegó al borde de las 11, el horario que había estipulado Martín Menem para comenzar la sesión pedida por el PRO y La Libertad Avanza. En el texto firmado por la prosecretaria parlamentaria, Ana Lozano, el oficialismo definía incorporar en el temario que se discuta la ley de financimiento de universidades nacionales. Finalmente el Gobierno, en cabeza del titular de Diputados, había cedido a la presión de la Unión Cívica Radical. Así logró evitar quedarse sin quórum, como el miércoles pasado: los diputados radicales se sentaron en el recinto 11.45, justo cuando ya estaba vencido el tiempo de media hora de gracia para levantar las sesiones.

Con exactamente 129 diputados, el mínimo para el quórum, Diputados abrió una jornada que se espera se extienda por más de 20 horas. El eje central está en la educación, en medio del paro universitario de 72 horas por el reclamo de mejoras salariales. Además de la iniciativa que busca garantizar el financimianto para las casas de altos estudios, en el temario hay una resolución para declarar a la educación como servicio esencial. También están reformas sobre seguridad, enviadas por Patricia Bullrich, como el Registro de Datos Genéticos y un blanqueo de armas, y tratados internacionales.

El inicio de la discusión estuvo marcado por la tensión a partir de los libertarios que viajaron a la cárcel de Ezeiza para visitar a represores condenados por delitos de lesa humanidad. La izquierda reclamó que se sume al temario los proyectos de sanción a los seis legisladores de LLA, pero fue rechazado.

Para el final de la maratónica jornada se espera que el tema vuelva, porque es el momento en que se acordó para que haya expresiones al respecto. El oficialismo logró sortear la polémica de la visita a Alfredo Astiz y otros genocidas ya que apra mañana se convocó discutir el tema en el ámbito de la Comisión de Peticiones y Reglamento, a cargo de Silvia Lospennato (PRO), hoy ese escándalo solo quedará en lo discursivo.

También está incluido al final de la jornada un repudio del oficialismo y el macrismo contra “el fraude electoral venezolano perpetrado por el gobierno de Nicolás Maduro”. Seguramente además habrá referencias al caso de violencia de género que involucra al expresidente Alberto Fernández.

El acuerdo que logró el radicalismo desactivó el pedido de sesión formulada para más tarde, concretamente desde las 16 de este mismo miércoles. Todo será una misma sesión. UP pidió sumar al temario la recuperación de FONID, pero no tuvo acompañamiento de los demás bloques.

Otro fracaso en una sesón en siete días hubiera sido un problema para Menem, que recién cedió cuando se dio cuenta que el PRO no había podido conseguir quórum. Hasta anoche había habido frenéticas conversaciones entre las bancadas dialoguistas. La espada amarilla era Alejandro Finnochiario, que al temario suspendido de la semana pasada por el desplante del espacio de Miguel Pichetto le sumó la declaración de la educación como servicio esencial para atraer a los opositores cercanos, pero la última palabra sobre el OK con los radicales lo tuvo que dar el oficialismo.

Cuando la sesión llegue a la noche habrá otro momento de tensión porque la oposición aliada quiere que se llame a un cuarto intermedio, debido a que para este jueves Encuentro Federal, acompañado por la Coalción Cívica, y con el respaldo de UP y la izquierda, pidieron una sesión para voltear el DNU que le otorgó a la SIDE $100.000 millones. Ese descenlase aún es incierto.

IG/MC