Tribunal de San Martín probó que Sabag Montiel y Uliarte convivían antes del atentado a la Vicepresidenta
Un Tribunal de San Martín consideró probado que Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte convivían antes del atentado a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, causa por la que se encuentran detenidos. Además, que el DNI ajeno encontrado en su casa forma parte del mismo “contexto criminal”, según dio a conocer hoy el Tribunal Oral Federal 5 del partido bonaerense.
Desde el 15 de junio pasado, ambos están acusados por tenencia ilegítima del documento de identidad de un ciudadano que confirmó haberlo perdido años atrás. De acuerdo con el juez que lleva esta investigación, Sabag Montiel “mantuvo en el tiempo la detentación del DNI bajo su esfera de custodia en su domicilio, coetáneamente con su detención en relación a los otros delitos por los cuales fuera oportunamente procesado, esto es, tentativa de homicidio calificado ─en contra de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner─ portación ilegal de arma de guerra y el acopio de municiones sin la debida autorización legal compatibles con aquella arma, en el mismo domicilio en el que se incautó el documento nacional de identidad”.
Héctor Sangretti, en este contexto, aseguró que la tenencia del DNI era parte integral del crimen que se les imputa, contrario a la ausencia de peligrosidad alegada por la defensa. “Resulta cuanto menos de precaria verosimilitud que Sabag Montiel hallase un documento de identidad tirado en la vía pública cuatro años después de que su titular lo extraviara”, sostuvo.
El magistrado, además, rechazó las declaraciones de Uliarte, quien había negado la convivencia con el imputado. Esto se debe a que, durante el allanamiento de la casa del acusado, se encontraron documentos personales de la mujer, entre los que destacan su currículum vitae y estudios médicos, lo cual indica que su estadía en la vivienda era permanente y extendida en el tiempo.
“Resulta inverosímil que la imputada desconociera la presencia del documento nacional de identidad, hallado por los preventores a simple vista, dentro del diminuto monoambiente que compartía con Sabag Montiel. Y más inverosímil resulta, cuando vemos que esa convivencia era coetánea con la detención de ambos en relación a los hechos concomitantes por los que fueran procesados”, argumentó Sangretti.
Así, descartó la estrategia de la defensa de Uliarte, que buscaba desligarse de toda responsabilidad por el intento de homicidio contra la vicepresidenta bajo el argumento de que, a pesar de su vínculo con Montiel, ella desconocía su plan en tanto “respetaba su privacidad”.
Con información de agencias
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