Una ballena lo tragó y luego lo escupió: “Podría haber muerto”
Adrián Simancas, el joven venezolano que fue tragado por una ballena que luego lo expulsó, afirmó que “en esos tres segundos” pensó que estaba “muerto”.
El muchacho practicaba packrafting junto a Dell Simancas, su padre de 49 años, en las aguas del Estrecho de Magallanes y el hombre grababa a su hijo mientras remaba, pero de repente apareció una ballena jorobada que salió a la superficie con la boca abierta y engulló al joven.
“Sentí como un golpe por detrás entre algo que me levantaba y me succionaba al mismo tiempo. Una sensación como que te golpea una ola, pero era demasiado fuerte”, sostuvo Simancas en diálogo con la prensa chilena.
El joven sostuvo que “cuando volteó” vio algo entre “azul oscuro y blanco” y agregó: “Me roza un poco la cara una textura babosa y se cierra alrededor de mí. Esto fue en menos de un segundo, muy rápido. No entendía qué pasaba. Mientras estaba hundiéndome sin poder ver nada pensé que había muerto, que ya no tenía nada que hacer”.
Además, señaló que “cuando salió del agua sintió miedo de que volviera a atacarlo”, a la vez que afirmó: “Yo le advertía a mi papá y ahí es cuando él me estaba tranquilizando”.
Según indicaron especialistas en fauna marina, las ballenas jorobadas suelen alimentarse abriendo la boca cuando emergen a la superficie para tragar la mayor cantidad de presas posibles entre las que destacan el plancton y peces pequeños, pero los seres humanos no forman parte de su dieta, por lo que de inmediato soltó al hombre.
MM con información de la agencia NA.
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