El 30 de octubre de 1974, el mundo entero se detuvo para presenciar una de las peleas más épicas de la historia del boxeo. En la profundidad de la selva congoleña, Muhammad Alí, con su astucia y rapidez, logró vencer al poderoso George Foreman, en un combate que se conoció como “The Rumble in the Jungle”. Este enfrentamiento no solo coronó a Alí como campeón mundial, sino que también se convirtió en un símbolo de resistencia, orgullo y unidad para el pueblo congoleño.