La canasta básica alimentaria: una familia necesitó $68.359 para no ser pobre
La canasta básica alimentaria, integrada por los productos mínimos que necesita una familia para comer y no caer bajo la línea de indigencia, aumentó 0,7% en agosto, mientras que la suba de la canasta básica total, que introduce otros bienes y servicios y traza la línea de la pobreza, fue de 1,2%. En ambos casos, se trata de la variación más baja desde mayo de 2020 y los datos son también inferiores a la inflación promedio del mes, que fue de 2,5%.
La desaceleración de la suba de las canastas que reflejó el informe publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) se explica por una moderación de los precios de los alimentos, generada sobre todo con por una estabilización de la carne y una baja en las verduras. En el Indice de Precios al Consumidor (IPC) de agosto, publicado esta semana por el Indec, la variación promedio de los precios fue de 2,5%, mientras que la categoría “alimentos y bebidas alcohólicas” mostró una variación de 1,5%.
Más allá de estos últimos datos, que comienzan a revertir una tendencia, si se mira la comparación con el mismo mes de 2020 se advierte que la canasta básica alimentaria aumentó 55,5%, por encima del promedio general, que fue de 51,4%. La canasta básica total (que, como se dijo, contempla más que alimentos) tuvo una variación de 50,3% interanual.
De acuerdo con los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), una familia tipo (integrada por dos adultos y dos menores) debió contar en agosto con $29.213 para no caer en la indigencia. Son $210 más que en julio y $10.420 más que un año atrás. La misma familia necesitó generar ingresos por $68.359 para no ser considerada pobre; $782 más que en un mes atrás y $22.881 por encima de agosto de 2020.
Estos valores muestran que dos salarios mínimos (de $28.080 en agosto) no alcanzan para mantener una familia de cuatro integrantes a salvo de la pobreza. Incluso si se considerara el valor que alcanzará este concepto en septiembre ($29.160), cuando se termine de aplicar el aumento de 35% negociado este año, dos salarios mínimos no alcanzarían a cubrir las necesidades mínimas que hoy tiene un hogar familiar.
Estos valores muestran que dos salarios mínimos (de $28.080 en agosto) no alcanzan para mantener una familia de cuatro integrantes a salvo de la pobreza.
En este contexto, el Ministerio de Trabajo anticipó el adelanto de la reunión para revisar el salario mínimo, que tendrá lugar el martes de la semana próxima. Así, se buscará sumar un porcentaje adicional a la suba definida en abril, cuando se consideraba el pronóstico oficial de una inflación anual del 29%. De acuerdo a los números presentados ayer a la medianoche por el Ministerio de Economía en el presupuesto 2022, este año cerrará con un aumento de precios en torno al 45%.
DT
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