Sheraton se va y Córdoba se queda sin cinco estrellas
La marca Sheraton para Argentina y América latina es muy fuerte. Ni bien comenzó la pandemia, la multinacional turística norteamericana Marriott decidió desprenderse de sus marcas en Montevideo y Córdoba; dejando de explotar así, su principal hotel en Uruguay y en el interior del país. Pero en los papeles, la multinacional siguió a cargo de ambos hoteles y en el caso el Sheraton Córdoba su responsabilidad comercial finaliza el próximo 31 de mayo, cuando se hará cargo del hotel, su socio argentino, el grupo Quinto Centenario.
La situación de este ícono del turismo de convenciones en Argentina es un fotograma de lo que sucede con el sector hotelero a nivel nacional e internacional por la pandemia de Covid-19, una película de terror o cine catástrofe para la industria del turismo.
1.700 hoteles menos
Un informe de la Asociación de Hoteles de Turismo (ATH) revela que desde la aparición de la pandemia del Covid-19 en Argentina en marzo de 2020, se cerraron 1.700 hoteles de diferentes categorías. El caso más emblemático, quizá sea, el Sheraton Córdoba.
Pero el hotel cordobés de la cadena Marriott no es el único que cerró: la franquicia Gotel Hotel Management anunció el cierre temporario del Sheraton Mar del Plata, que suspenderá a sus 80 empleados durante dos meses; quienes cobrarán al igual que sus primos cordobeses, el 75% de sus salarios.
A fines de enero de este año, ya había cerrado el otro cinco estrellas de Córdoba: el Amerian Park Hotel enclavado frente al Patio Olmos, en el cruce de la avenida Hipólito Yrigoyen y el bulevar San Juan: “Fue inviable sostener las operaciones por la baja demanda, la falta de ingreso en los últimos 11 meses, y la ausencia de ayuda estatal para soportar esta crisis”, sostuvo Roberto Amengual, presidente de Amerian y de la Asociación de Hoteles de Turismo.
Un informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) publicado en marzo pasado, referido a la ocupación hotelera en plena temporada verano 2020/21 –se tomó el mes de enero completo- reveló que la Tasa de Ocupación de Habitaciones (TOH) sólo fue del 35,2% y que la estadía promedio fue de sólo tres noches. El informe reveló además que la caída respecto del mismo período del año anterior fue del 54,2%.
En un comunicado de mediados de abril, la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (FEHGRA) advirtió que la situación que atraviesa el sector por la pandemia “no se trata de una crisis coyuntural de la cual será rápido recuperarse” y que antes de las restricciones anunciadas por el presidente Alberto Fernández sobre la circulación en el AMBA, “había desaparecido el 10% de las empresas del sector, lo que significa el cierre de más de 8.000 empresas en todo el país”.
Los hoteleros también citaron el informe del INDEC que revela “la pérdida de más de 170.000 puestos de trabajo totales en el sector hotelero-gastronómico entre el cuarto trimestre del 2019 y el cuarto trimestre del 2020, lo que significa la destrucción aproximada del 25% del empleo total del sector”.
El primer 5 estrellas
A mediados de los ‘90, bajo el amparo de una generosa ley de promoción turística sancionada durante el gobierno de Eduardo Angeloz, Marriott se asoció con la familia cordobesa Alvarez Rivero –dueña del grupo Quinto Centenario que explota el Nuevocentro Shopping donde está emplazada la imponente torre vidriada-; y en septiembre de 1997 se abrieron las puertas del Sheraton Córdoba, el primer hotel 5 estrellas de Córdoba.
Por este hotel de lujo pasaron figuras como Felipe VI, el último rey de España; o la reina del pop Madonna. También se alojó dos veces durante su gobierno, Carlos Menem. Cuando Sheraton Córdoba abrió sus puertas, el presidente de Quinto Centenario era Horacio Alvarez Rivero; quién había sido interventor del Banco Hipotecario Nacional (BHN) y presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) durante el menemismo, cuando Domingo Cavallo fue ministro de Economía. En 2015, cuando Sergio Massa era candidato a presidente por el peronismo no kirchnerista, y su jefe de campaña era Alberto Fernández; ambos se alojaron el emblemático hotel de Duarte Quirós 1.400.
Ese mismo 1997 de la inauguración del Sheraton Córdoba, Susana Giménez, con su desparpajo, le apuntó a su ex socio, el cura Julio César Grassi, si quería construir un Sheraton en la Fundación “Felices los Niños”; y en 1973, cuando Héctor Cámpora tuvo su fugaz presidencia, la Juventud Peronista cantaba “Qué lindo, qué lindo, qué lindo que va a ser, un hospital de niños en el Sheraton Hotel”.
Pero eso es historia: desde marzo del año pasado, el hotel está cerrado. En mantenimiento trabajan sólo cuatro personas -uno por turno, y uno de relevo- lo que hace que el edificio no luzca como cuando cerró sus puertas en marzo de 2020, cuando el presidente Alberto Fernández lanzó la primera cuarentena estricta. Según la revista Ferias & Congresos de enero 2020, el Sheraton Córdoba fue el destino mejor posicionado del interior del país en 2018, con 50 congresos y 28.548 asistentes.
Desde marzo del año pasado, el hotel está cerrado. En mantenimiento trabajan sólo cuatro personas -uno por turno, y uno de relevo- lo que hace que el edificio no luzca como cuando cerró sus puertas en marzo de 2020
Quienes conocen el mercado inmobiliario y turístico le dijeron a elDiarioAR que un hotel de las características del Sheraton emplazado en la principal del interior de Argentina tiene un valor de unos US$ 40 millones: esta mole que se puede ver desde varios lugares de la ciudad cuenta con 188 habitaciones y suites; un restaurante de cocina internacional; dos bares, dos salones de convenciones con capacidad para 1.200 personas –el Salón Lugones y su hermano menor Champaquí-; un business center totalmente equipado, spa, gimnasio, piscina y canchas de tenis y de paddle. Los pasajeros, donde el 90% eran asistentes a congresos y convenciones, y el 10% turistas; eran atendidos por un plantel de 100 empleados fijos y otros 50 contratados a demanda de los eventos que ofrecían.
En 2011, tras 14 años de funcionamiento, el Sheraton Córdoba fue remodelado a nuevo, luciendo el esplendor de un 5 estrellas. Una década después, no se sabe qué pasara
En 2011, tras 14 años de funcionamiento, el Sheraton Córdoba fue remodelado a nuevo, luciendo el esplendor de un 5 estrellas. Una década después, no se sabe qué pasara. Los 100 empleados fijos del hotel vienen cobrando el 75% de sus salarios desde abril de 2020, marzo fue el último mes que Quinto Centenario, explotadora de la franquicia de Marriott, pagó los salarios completos. En 2020, desde el 1 de abril, el Estado nacional pagó el 66% de los ingresos de los trabajadores a través del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) y el otro 33% lo hizo la patronal cordobesa. En 2021, la asistencia de la Nación fue a través del programa Repro II. De los 100 empleados fijos, alrededor del 30% se desvinculó de la compañía cobrando el 100% de sus indemnizaciones: “Eran los empleados más nuevos, de dos, tres, años de antigüedad. Sólo hay un caso de cinco años en la empresa. Imagine que Sheraton estaba en Córdoba hace 23 años”, confiaron desde el gremio de los hoteleros y gastronómicos. En 2020, Quinto Centenario anunció que tuvo pérdidas por $ 50 millones de la explotación de este hotel 5 estrellas.
Las negociaciones
La familia Alvarez Rivero es reacia a hablar con la prensa sobre el futuro del hotel, una vez que pase completamente a sus manos. El 8 de junio, una semana después de hacerse cargo 100% del hotel, Quinto Centenario tendrá una reunión en el Ministerio de Trabajo de Córdoba con las autoridades estatales; sus empleados, y la Unión de Trabajadores Gastronómicos y Hoteleros de la República Argentina (UTGHRA) que en Córdoba dirige el interventor Juan Carlos Rousselot (h); donde informará sobre las acciones a seguir. Extraoficialmente, la idea del grupo Quinto Centenario, teniendo en cuenta la situación epidemiológica, económica y social, es reabrir las puertas en marzo de 2022.
Una posibilidad es que Quinto Centenario se asocie a otra franquicia internacional para explotar el hotel; también se habló de adaptar el edificio para oficinas de coworking, como ocurrió con la torre de Montevideo; aunque el valor agregado del caso cordobés sería que la nueva marca estaría asociada al Nuevocentro Shopping.
El presidente de la Agencia Córdoba Turismo, Esteban Avilés, opinó que “este proceso pandémico impactó en el sector turístico y hotelero del país, no sólo de Córdoba; y el contexto de un dólar volátil, no sólo en Argentina, sino en toda América latina; hace que estas grandes compañías rediseñen sus políticas globales”. La Agencia Córdoba Turismo es un ente público con participación privada y opera como un ministerio.
Avilés destacó que “Quinto Centenario, la familia Alvarez Rivero, es muy seria, tiene un fuerte compromiso con el desarrollo de Córdoba, lo ha demostrado a lo largo de los años con sus emprendimientos, sabemos que están buscando nuevas banderas para explotar el hotel, son muy responsables, muy serios y hay un reconocimiento muy profundo hacia ellos. La fortaleza que tienen a la hora de negociar con nuevos inversionistas es su tradición, su buen nombre, su responsabilidad, esa foto es altamente beneficiosa y seguramente el hotel volverá a brillar”.
El titular de la Agencia Córdoba Turismo señaló que el turismo genera ingresos por $ 9.000 millones anuales en Córdoba y que entre el 10% y 12% de esa torta corresponde al turismo de congresos y convenciones, en lo que se especializa el Sheraton Córdoba: “Imagine el impacto para nuestra provincia que significó el cierre del hub Córdoba, esos vuelos nos conectaban con todo el país y destinos internacionales. Hay 165 mil cordobeses que viven del turismo; la crisis es global, los ingresos que perdemos por turismo son muy altos”.
160 PPC
Desde la UTGHRA, el secretario gremial de la Regional Córdoba, Cristian Ruíz Caballero detalló que “la situación no es fácil, la foto de marzo/abril de 2020 decía que la crisis duraría dos o tres meses y que no debía llegar hasta diciembre. Un año después tenemos la misma foto, pero la situación es mucho peor; no sólo en el Sheraton o el Amerian, sino en todo el sector turístico y hotelero. En pandemia ya tuvimos 160 presentaciones de Procedimientos Preventivos de Crisis, que fueron rechazados. ¿Sabe lo que es eso?, es la puerta abierta a un cierre; explíqueme qué va a responder el Ministerio de Trabajo el año que viene cuando le presenten tres balances negativos. Sin vuelos, no vienen pasajeros. Mientras el mundo se abre, nosotros nos cerramos, es entendible, en parte por nuestros vecinos como Brasil y Uruguay; pero con protocolos hay que abrir y hacerlos cumplir”.
El dirigente sindical señaló que “la empresa, Daniel Alvarez –es el nuevo titular de Quinto Centenario-, nos dice que él hace todo lo posible. Abrió un plan de retiros voluntarios, donde se pagaba entre el 60% y el 65% del monto total; lo subimos al 100% con una acción de nuestro sindicato bajo el artículo 41 de la Ley de Contrato de Trabajo, que significa una desvinculación de común acuerdo. El Amerian cerró, Howard Johnson está repuntando algo con las plazas que dejaron Sheraton y Amerian; pero está muy mala la situación. Sheraton Córdoba debe devolver adelantos de pagos por congresos y convenciones, que les hicieron en dólares. Es muy difícil remontar si no tenemos vuelos internacionales en Córdoba, la gente no va a llegar a Ezeiza para luego venir a Córdoba, no es viable”.
Además de la crisis de los grandes hoteles como Sheraton Córdoba y Amerian Park, la UTGHRA Córdoba contabilizó que en Villa Carlos Paz, el principal centro turístico de esta provincia se perdieron de ingresar $ 250 millones sólo por turismo: “Ese dinero no ingresó directamente, entonces no hubo derrame ¿Sabe cuánta plata es para una ciudad $ 250 millones?, bueno, esa plata no está y la consecuencia la pagan los comerciantes y los trabajadores”.
Sobre el cierre de este emblemático hotel, el concejal Juan Negri (Córdoba Cambia), que integra la Comisión de Educación, Cultura y Turismo señaló que “seguimos el tema con atención, la Municipalidad no ha hecho nada, de hecho, hizo poco y nada con las actividades que se han venido a pique, que se están fundiendo; más que condonarle algo de impuestos. La Municipalidad no ha hecho nada, no ha articulado nada tampoco, y no creo que esta sea la excepción. El intendente no ha gestionado la pandemia en salud, ni en términos de aliviar el bolsillo a muchas PyMEs de la ciudad que se están fundiendo y ni hablar de polos que son atractivos para el turismo, como en este caso, de convenciones o lo que el Sheraton significa como ícono para la ciudad”.
Fernando Faracco, director ejecutivo de la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica de Córdoba, apuntó que en esta Capital “antes de la pandemia había 11.000 camas registradas ante la Agencia Córdoba Turismo y ahora tenemos 7.000 camas”, detallando la situación en esta ciudad. Respecto de las ayudas de la Provincia y la Municipalidad de Córdoba, el dirigente hotelero detalló a elDiarioAR que “la Municipalidad nos eximió de Inmobiliario y Automotor, hicimos un sistema de canje, no tuvimos que pagar el 2020 y ahora estamos gestionando el 2021. Y la Provincia nos hizo una reducción grande en Ingresos Brutos y también en Inmobiliario y Automotor de los establecimientos hoteleros, que son los que más tiempo han estado cerrados. La Provincia y la Municipalidad nos han dado eso”.
En agosto del año pasado, el intendente cordobés, Martín Llaryora anunció una serie de beneficios para el sector hotelero de la ciudad: en Comercio, Industria y Servicio se otorgó una eximición al mínimo en todas aquellas áreas que no tuvieron actividad hasta fin del 2020; en el impuesto Automotor se exceptuó el pago desde el inicio de la pandemia hasta la Cota 5, que venció en diciembre; y en Inmuebles de hotelería y turismo receptivo, se eximieron las cuotas desde marzo hasta la Cuota 11, que venció en diciembre.
“Estamos subsistiendo”
Agustín Quinteros, socio gerente del “Sol de Piedra, Apart, Suites & Spa”, un moderno hotel de 11 pisos y 45 habitaciones inaugurado hace nueve años, le cuenta a elDiarioAR que “tuvimos un abril bravo y mayo se presenta peor, oscuro, feo; la ocupación es del 20% o el 10%” y pese a la pandemia, el hotel enclavado en Nueva Córdoba a sólo cinco cuadras del Cabildo Histórico sigue abierto y reinventado: “Estamos subsistiendo. Nos reinventamos como pudimos, como tenemos la modalidad apart, nuestras habitaciones son grandes y tenemos otra comodidad que los hoteles, otra amplitud, los desayunos son en la habitación. Tenemos alquileres mensuales con tarifas mensuales, que nos permiten cubrir los gastos fijos. De las 45 habitaciones pretendemos tener cubiertas 20 bajo esa modalidad y no llegamos a 10, es muy difícil”.
Los pasajeros que llegan a este hotel no son turistas, explica Quinteros: “Desde que se abrió un poco más la actividad, en enero, los pasajeros que recibimos vienen por cuestiones clínicas, estudios médicos, cirugías.; viene gente del interior y del NOA. También tenemos gente que es clientela corporativa, vienen por trabajo y buscan espacios cómodos, las empresas nos buscan por eso; pero es clientela de antes. Cero turismo, salvo Semana Santa que es una fecha puntual”.
Esta PyME cordobesa tenía 13 empleados en marzo de 2020 y hoy tiene 10: “De los empleados, no despedimos a nadie; los chicos que se han ido, ha sido por problemas de pandemia o por crecimiento personal. Sí reubicamos puestos, por ejemplo el bar, por protocolo no lo abrimos más. Si bien podíamos abrirlo, decidimos que los desayunos sean en cada cuarto, por mayor seguridad, entonces reubicamos a ese personal”.
La situación de un monstruo del turismo como Marriott y un hotel PyME manejado por una familia, demuestra que la pandemia no hace distingos a la hora de avanzar. Y cada uno se acomoda como puede.
GM
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