El ministro del Interior de Perú justificó el desalojo por la fuerza de la Universidad de San Marcos en Lima
Vicente Romero, ministro del Interior de Perú, afirmó que el operativo policial que ingresó el sábado por la fuerza en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) en Lima estaba justificado, a pesar de que hay acusaciones que afirman que no cumplió con los procedimientos legales.
“He pedido un informe pormenorizado de la intervención, pero sí ha estado justificada de acuerdo a ley”, indicó ayer domingo en una entrevista donde matizó que, de haber algún incumplimiento, se establecerán los responsables, según informó la agencia Europa Press.
Romero explicó que el operativo tuvo lugar en el marco del estado de emergencia, razón por la cual no era necesaria la presencia de fiscales para la intervención: “Había flagrancia y estado de emergencia, cuando hay flagrancia interviene inmediatamente la Policía Nacional, cuando hay flagrancia no hay necesidad de la presencia de la Fiscalía”.
El sábado pasado, cerca de 400 policías ingresaron con tanquetas y apoyo de fuerzas especiales en la universidad ubicada en la capital del país, sin cumplir con los requisitos legales para esa intervención, según denunciaron los manifestantes.
Para entrar, las fuerzas de seguridad rompieron la enorme reja con un vehículo antimotines y detuvieron a decenas de manifestantes y estudiantes que dormían desde hace varios días en el lugar. El fiscal superior peruano Alfonso Barrenechea, coordinador nacional de las Fiscalías de Prevención del Delito, confirmó que hubo 205 detenidos, según recogió RPP.
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (OACNUDH) instó a “asegurar la legalidad y proporcionalidad de la intervención y garantías del debido proceso” y recalcó que llevar a los detenidos “ante autoridades judiciales y la supervisión fiscal es esencial para la protección de los derechos de todas las personas”.
Mediante un comunicado institucional, la UNMSM indicó que solicitaron la intervención policial por una denuncia de agresión contra la seguridad privada. “El sábado 21 de enero, la Policía Nacional de Perú, en evidente uso de la fuerza, ingresó al campus universitario, sin presencia de la Defensoría del Pueblo ni del representante del Ministerio Público. Por lo tanto, denunciamos el abuso de autoridad hacia nuestros estudiantes intervenidos”, se lee en la misiva.
Abogados de la región de Puno que llegaron al lugar denunciaron que no se permitió la presencia de los defensores. El ministro, quien señaló que la intervención fue motivada para “dar seguridad”, destacó que durante la operación “no hubo ni un solo herido” por parte de los agentes de seguridad.
Según la universidad, la Policía actuó “de oficio” porque los manifestantes no cumplieron la supuesta promesa de retirarse el jueves. Durante la intervención, la Policía detuvo a 193 personas, de las cuales 192 fueron liberadas ayer domingo, informó la Fiscalía de la Nación en un comunicado. Una persona quedó detenida debido a que tenía una requisitoria previa.
Recuento de la “Toma de Lima”
Miles de personas llegadas del interior marcharon en Lima el jueves y el viernes, en protestas que en algunos casos derivaron en enfrentamientos cerca del Congreso, cuando la Policía les impidió avanzar con gases lacrimógenos y chorros de agua.
Para Romero, el trabajo de la Policía durante estos días de manifestaciones antigubernamentales en Perú ha sido “excepcional”, al tiempo que opinó que la marcha multitudinaria de la semana pasada -conocida como “Toma de Lima”- fue un fracaso.
La represión policial dejó hasta el momento 46 muertos -45 manifestantes y un policía- desde que las protestas estallaron en diciembre, tras la destitución y detención del entonces presidente Pedro Castillo, a quien sucedió Dina Boluarte en su condición de vicepresidenta. Además, otras 13 personas murieron por distintas causas relacionadas con las protestas, como accidentes producto de los bloqueos en las rutas.
Desde entonces y hasta el pasado viernes, la Policía Nacional del Perú (PNP) detuvo a un total de 378 personas acusadas de causar disturbios, informó el ministro del Interior. A última hora del viernes, se estimó que habían al menos 3.700 manifestantes distribuidos en distintos puntos de la capital, participando en la “Toma de Lima”.
Luego de la masiva manifestación del jueves en Lima, Boluarte descartó que vaya a presentar su renuncia e hizo un llamado al diálogo para devolver la calma al país. En un intento por aplacar las demandas, en diciembre el Parlamento adelantó los comicios de 2026 a abril de 2024, pero las manifestaciones persisten y el reclamo es por la salida inmediata de Boluarte y los congresistas.
LC con información de agencia Télam
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