El gobierno chileno ha decidido retirar su representación diplomática en Venezuela, como una medida de rechazo a lo que califica como “la dictadura de Nicolás Maduro”. Según declaraciones oficiales, el ejecutivo chileno también desconoció las últimas elecciones en ese país, señalando que fueron un fraude y denunciando la persecución sistemática contra opositores políticos, defensores de derechos humanos y organizaciones que discrepan del régimen venezolano.