Diez ideas prácticas para reutilizar tus corchos de vino
Los placeres del vino no tienen por qué terminar con el último trago. Del vino se aprovecha todo, el corcho también puede resultar muy práctico en casa.
Hay muchas cosas prácticas que podemos hacer con ellos, en lugar de tirarlos.
1. Corcho para limpiar un cuchillo oxidado
Todo lo que necesitás para retirar el óxido de los cuchillos, sin poner los dedos en peligro, es sumergir la mitad de un corcho en un producto limpiador suave. El corcho te permite agarrarlo y frotar sin riesgo. Como alternativa, utilizar jugo de limón y sal en el corcho: los granos actuarán como un exfoliante, y esto ayudará a eliminar las manchas.
2. Hacer una vela: ¡es muy fácil!
El corcho resulta un material absorbente estupendo, una propiedad que podemos aprovechar para cubrirlo de alcohol durante unas horas (mejor aún, si es todo un día), esperar a que se empape y, ¡usarlo como una vela que puede durar encendida varias horas! Para que resulte seguro, colocar el corcho en un frasco de vidrio.
3. Fabricar un tablero
Esta idea permite aprovechar no solo los corchos sino también algún viejo marco de fotos sin vidrio que esté tirado en el placard. Preparar los corchos cortándolos por la mitad (con cuidado), con un corte longitudinal.
Pegarlos uno junto a otro en el hueco pensado para colocar la fotografía; de modo que la parte plana quede dentro. Se puede trabajar en líneas, hasta completar todo el espacio. Utilizar con chinches para ordenar notas, listas del súper o lo que necesites.
4. Apoyafuente con corchos de vino
Hay varios modos de aprovechar la propiedad aislante natural que tiene el corcho. En la cocina, una de las más útiles seguramente sea usar este material para fabricar una base para apoyar las ollas calientes sin quemar la mesada ni dejar un agujero en el mantel.
El modo más simple de hacerla es ponerlos de pie, bien juntos, y colocar tantos como sean necesarios para cubrir la superficie de la olla. Cuando estén todos, juntarlos utilizando precintos de seguridad ¡Y listo!
5. Para proteger la cocina de salpicaduras
Para proteger las paredes que bordean la mesada de la cocina de las salpicaduras de grasa y otras manchas aquí va un remedio tan práctico como gratuito: crear un panel antisalpicaduras con los corchos de vino. La técnica es la misma que la explicada para construir el tablón de anuncios: hazles cortes longitudinales para que resulten más fáciles de pegar a la pared.
6. Como protección del piso
Tanto el parqué como los pisos de madera sufren con el contacto de las sillas y otros muebles que movemos y terminan dejando marcas. Pues bien: para evitarlo, se puede usar un trocito de corcho. Cortarlo en círculos y pegarlo a las patas de las sillas para proteger las superficies.
7. No pierdas las llaves
Solo necesitas enroscar un tornillo con argolla al corcho, y utilizar una anilla para meter las llaves. ¡Listo! También queda muy simpático si lo pintás o decorás como más te guste.
8. Para hacer una maceta
Las macetas decorativas pueden resultar muy caras. Por eso, pegar corchos a una maceta de plástico del montón para obtener, en su lugar, otra más linda puede ser una opción más económica.
9. Mango de cuchillo
Da pena tirar un cuchillo solo porque el mango se rompió. Resulta que es ideal para insertar la hoja de un cuchillo de hoja pequeña y utilizar el corcho como mango..
10. Sellos decorativos
El corcho es el material perfecto para fabricar sellos decorativos; ya que permite tallar con relativa facilidad la forma deseada.
Solo se necesita un marcador para dibujar antes la silueta, un cuchillo afilado y algo de maña. Se puedes crear corazones, un pájaro o una flor. Nunca una botella de vino tuvo tantas vidas, ¡salud!
E.S.M.
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