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Elecciones legislativas EEUU 2022
'No es migración, es invasión': el partido Republicano endurece la campaña para recuperar el Capitolio

Un grupo de migrantes participa en una protesta el lunes en la ciudad fronteriza de Tijuana, Baja California (México). Organizaciones civiles y migrantes mexicanas, que fueron deportados por EEUU y se encuentran en situación de calle reclaman en la intemperie contra el desamparo que ahora sufren tras la deportación, y acusan por la desatención a las autoridades de todos los niveles de gobierno en México.

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El tema de la inmigración en los anuncios televisivos de la campaña electoral de las primarias republicanas a celebrarse este año es uno de los más reiterados, destacándose en particular la palabra “invasión”, confinada hace unos años a los márgenes en el debate sobre esta materia. La mayoría de los candidatos la evitaban. Sin embargo, ahora docenas de anuncios que utilizan la palabra invasión por parte de republicanos que hacen campaña en todo el país.

En este ciclo electoral, el término 'invasión' se ha desplazado al centro principal de la narrativa republicana sobre inmigración.

“Vamos a poner fin a esta invasión”, dice, en un anuncio de campaña, Blake Masters, candidato republicano al Senado de EEUU en Arizona.

La palabra también ha aparecido en propagandas del gobernador Brian Kemp en Georgia, el senador Rick Scott en Florida y la ex presentadora de televisión Kari Lake, quien compite en una reñida carrera en las primarias republicanas para gobernadora en Arizona.

“Antes, estas ideas podrían haber sido vistas como atípicas. Pero ahora, es realmente preocupante”, dijo Vanessa Cárdenas, subdirectora de America's Voice, un grupo de defensa de inmigrantes que ha estado rastreando anuncios políticos. “Este tipo de retórica tiene como objetivo agitar a la gente por razones políticas”, asegura Cárdenas, “porque hace que la gente sienta ira y odio”.

Lazos con una teoría de la conspiración

La palabra invasión tiene una larga historia en los círculos nacionalistas blancos. Durante años, fue ampliamente utilizada por los partidarios de la “teoría del reemplazo”, la falsa teoría de la conspiración que dice que los judíos o las élites están reemplazando deliberadamente a los estadounidenses blancos con inmigrantes y personas de color. Hasta hace poco, rara vez lo escuchaba de los candidatos o funcionarios republicanos

A partir de que un hombre blanco, tres años atrás abrió fuego en un Walmart de El Paso y mató a 23 personas, la mayoría de ellas latinas motivado por lo que el mismo asesino llamó una “invasión hispana” de personas que llegan ilegalmente a EEUU, la cantidad de detenciones de migrantes en la frontera sur de EEUU ha alcanzado nuevos récords. Y, la retórica política en torno a la inmigración se ha vuelto más extrema.

La teoría conspirativa del 'gran reemplazo' ya no es marginal, sino que adquirió un uso generalizado principalmente notorio en la narrativa política. El expresidente Trump  usó mucho la palabra invasión.

“Trump de alguna manera expuso los tipos de retórica que resonaron entre los republicanos”, aclara  John Thomas, un estratega republicano con sede en California.

El trabajo de Thomas se centra en los discursos de varios candidatos a cargos estatales en Texas que han utilizado la palabra “invasión” en sus mensajes durante este ciclo electoral. Eso se debe en parte al ejemplo de Trump, dice. Aunque para Thomas, el problema más importante es lo que está sucediendo en la frontera sur, donde la cantidad de detenciones de migrantes está en camino de superar los 2 millones este año, rompiendo el récord establecido el año pasado.

“La palabra invasión presiona los botones calientes de los votantes republicanos, ya que sienten que es un asunto mucho más importante de lo que era antes”, dijo Thomas. “La retórica está aumentando su intensidad para que coincida”.

La frontera sur

“Nunca he visto lo que estamos viendo hoy”, informó  Brad Coe, el alguacil del condado de KinneyTexas, en una conferencia de prensa el mes pasado. Coe dijo que sus agentes están abrumados tratando de atrapar a inmigrantes no autorizados que cruzan ranchos y pueblos pequeños.

“Esto no tiene precedentes en el condado de Kinney”, dijo. “Nuestro número se triplicará. No podemos sostener este tipo de invasión”.

Las detenciones de la Patrulla Fronteriza alcanzan un récord. Pero eso es solo una parte de la historia.

Los intransigentes en materia de inmigración argumentan que es justo usar la palabra invasión incluso si los migrantes que cruzan la frontera no parecen una fuerza militar tradicional, en parte porque su gran número ha distraído a los agentes de la ley de responder a otras amenazas.

Sin embargo, los defensores de los inmigrantes aseguran que la narrativa de la invasión es fundamentalmente engañosa.

Casi la mitad de todos los migrantes detenidos en la frontera sur son rápidamente expulsados ​​de regreso a México. Casi todos están desarmados. Muchos huyen de la pobreza y la violencia y de los gobiernos autocráticos de todo el hemisferio, y se entregan a la Patrulla Fronteriza con la esperanza de obtener asilo u otras protecciones en EEUU.

Llegar a la meta saltando sobre las espaldas de los inmigrantes

“Son madres, niños y padres, personas que básicamente están haciendo lo que cualquiera de nosotros haría si estuviéramos en su lugar”, dijo la representante Veronica Escobar, una demócrata que representa a El Paso en el Congreso.

Lo que preocupa a Escobar es que esta retórica de invasión inspirará otra tragedia como el tiroteo masivo en El Paso Walmart, o el tiroteo a principios de este año en Buffalo, donde murieron 10 personas negras.  “Estoy muy, muy preocupado por comunidades como la mía que veremos más actos de violencia cometidos contra inmigrantes, contra latinos, debido a esta retórica”, expresó  Escobar a la prensa el mes pasado.

AGB con información de medios y redes

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