Por la crisis en Jujuy, convocan a una marcha nacional para el 20 de julio

La crisis en Jujuy derivará la semana próxima en una movilización nacional contra el gobierno de Gerardo Morales, actual compañero de fórmula presidencial de Horacio Rodríguez Larreta. Organizaciones de derechos humanos, sindicales y sociales anunciaron este viernes desde el Congreso una protesta para el 20 de julio en todo el país. Buscan repudiar las “decenas de allanamientos, detenciones arbitrarias y causas armadas”, según sus expresiones, de los últimos días en la provincia.

La movilización se realizará en el marco de un nuevo aniversario de la denominada “Noche del Apagón”, ocurrido el 20 de julio de 1976, cuando se sucedieron una serie de secuestros en la localidad de Libertador General San Martín de Jujuy, la mayoría de ellos realizados con vehículos del ingenio Ledesma. 

La marcha, además, coincidirá a un mes de la represión ocurrida en la capital jujeña sobre la protesta contra la aprobación de la reforma parcial de la Constitución local. Esos episodios terminaron con varios detenidos y heridos, incluido un joven de 17 años que perdió un ojo por un balazo de goma. Desde entonces el gobierno de Morales lanzó una fuerte ofensiva para criminalizar la protesta y en las últimas 48 horas detuvo a 42 personas, entre ellos docentes, dirigentes sociales, sindicales y docentes y varios abogados defensores.

El anuncio de la manifestación nacional se hizo este viernes durante una conferencia de prensa protagonizada por referentes de derechos humanos como Estela de Carlotto (Abuelas de Plaza de Mayo) y Taty Almeida (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), además de secretario del área a nivel nacional, Horacio Pietragalla, dirigentes sindicales ligados al kirchnerismo, así como diputados oficialistas y del Frente de Izquierda.

Los dirigentes coincidieron en responsabilizar por las “detenciones arbitrarias” a Morales, exigieron su inmediata liberación, y denunciaron el ingreso de fuerzas policiales a las universidades públicas de Jujuy, como ocurrió en la sede de la UBA de Tilcara. Según supo elDiarioAR, ayer se presentó un habeas corpus por los detenidos, pero al cierre de esta nota no había tenido respuesta favorable. 

“Queremos repudiar a este individuo que pasó de ser represor a genocida, Morales. Es un reflejo de lo que puede llegar a pasar si estos individuos llegan a ganar las elecciones”, dijo Almeida ante los medios, y pidió: “Cuando vayan a votar hay que hacerlo con memoria y recordar no quién es el adversario, sino el enemigo”.

Carlotto, por su parte, destacó la importancia de “cuidar la democracia” y dijo que “hay delitos muy graves que no pueden pasarse por alto”, a la vez que llamó a “formar una gran cadena de unidad”. 

En la conferencia, Pietragalla ligó los episodios con la campaña electoral: “Le pedimos a Morales parar esta locura, en su afán de ser vicepresidente porque es peligroso y puede acarrear que todo el Estado sea responsable de las violaciones a los derechos humanos en Jujuy”.

La avanzada de Morales contra la protesta social derivó paralelamente en las universidades públicas. Por un lado, anteayer la Policía local irrumpió en una reunión del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Jujuy. Y por otro lado, el mandatario acusó por los piquetes en las rutas a trabajadores del Centro Universitario de Tilcara, que depende de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA.

En un comunicado, la Comisión por la Memoria manifestó condenó “la intromisión” de fuerzas policiales en la sede de la Universidad Nacional para detener a un docente. “Los hechos de represión, que no cesan desde hace semanas, derivaron en las últimas horas en el ingreso de efectivos de la policía provincial a la Universidad Nacional de Jujuy (UNJU), un hecho gravísimo que vulnera el principio de autonomía universitaria”, sostuvo la CPM en un comunicado.

El organismo de DDHH bonaerense, recordó que “esa intromisión se produjo durante la sesión del Consejo Superior de la universidad, cuando la comunidad educativa debatía el alcance regresivo de la reforma constitucional impulsada por el gobierno provincial”.

La aprobación de la reforma constitucional generó una fuerte controversia a nivel político y social en la provincia. La masiva protesta del 20 de junio dejó como saldo unos 170 heridos, uno de gravedad por traumatismo de cráneo, y al menos 68 detenidos por la represión policial que se extendió por más de cuatro horas. Morales recibió un respaldo cerrado de todo el arco de Juntos por el Cambio, que culminó con su nominación finalmente como vice de Larreta.

A nivel político también impactó en el Frente de Todos. Este mismo viernes el presidente Alberto Fernández intervino el Partido Justicialista en la provincia, porque acompañó la aprobación de la reforma constitucional. “El presidente del PJ Alberto Fernández ordenó la intervención del partido Justicialista de Jujuy para ponerlo en la misma línea del peronismo en todo el país de una clara oposición al gobierno y las políticas represivas de Gerardo Morales”, informó la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, en su cuenta de Twitter.

MC con información de Télam