Los salarios están tan bajos como los dejó Macri, alcanzan para comprar menos comida y corren riesgo de empeorar

El salario registrado de los sectores público y privado en relación a la inflación, con una base de 100 puntos a diciembre de 2019, se encontraba en junio de este año en el mismo nivel que entonces, según calcula la economista Mariana González, del Centro de Investigación y Formación de la Central de Trabajadores de Argentina (Cifra-CTA). Es decir, hasta antes del nuevo salto inflacionario de julio pasado por la renuncia de Martín Guzmán al Ministerio de Economía, el sueldo estaba tan bajo como lo dejó el gobierno de Mauricio Macri. En la segunda mitad de 2021 se había recuperado tras el impacto de la pandemia, pero en el primer semestre de 2022 esa mejora leve se diluyó por el efecto de la guerra de Ucrania y con la inestabilidad provocada por la dimisión de Guzmán puede ir a peor.

Ya en el gobierno de Macri las remuneraciones formales habían perdido un 19,6%. Pese a la promesa de Alberto Fernández de mejorarlas, por ahora no lo ha conseguido e incluso van camino de empeorar. No por nada este miércoles se unieron las disímiles vertientes sindicales y de movimientos sociales contra la inflación, que carcome el poder de compra.

En este gobierno se encarecieron sobre todo los alimentos, clave en las familias más pobres. González, de Cifra-CTA, calcula que el salario ajustado por el precio de la comida cayó 6% respecto de diciembre de 2019 y 3% en relación al mismo mes de 2021. Es decir, en parte los precios de los alimentos se dispararon durante la pandemia y en otra medida, por la invasión rusa a Ucrania.

Con la mayor inflación de los últimos 30 años, que ya está en 71% interanual, la pobreza se encuentra levemente peor que la heredada de Macri, cuando llegó al 35%. Después del salto por la pandemia al 44%, bajó al 37% en el segundo semestre de 2021. Aún se desconoce el dato oficial de la primera mitad de 2022, pero el investigador Leopoldo Tornarolli, del Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales (Cedlas) de la Universidad de La Plata, calcula que arrojará un número similar al 37% e incluso no descarta una leve baja. Sucede que en el primer trimestre, a partir de datos oficiales, estimó una baja al 34,2% (González proyectó un 34,5%), pero con la mayor inflación del segundo trimestre vaticina que el promedio semestral arroje un 37%. Su temor es que en la segunda mitad del año sí vuelva a aumentar.

AR