Otro caso de abuso y acoso en el cine español: varias mujeres acusan al director Armando Ravelo
La actriz canaria Koset Quintana denunció este fin de semana a través de sus redes sociales el acoso que sufrió por parte del director de cine Armando Ravelo cuando tenía 15 años y él 32. “Publicar esto me requiere de estrés, pero no carezco de la valentía en este momento porque habiendo leído hoy los testimonios ocultos durante tanto tiempo para Carlos Vermut, creo que hablo en nombre de muchas si digo que estamos muy cansadas de que haya tantos hombres en las altas esferas haciendo uso de su poder para violar, acosar y manipular a otras, en este caso, también vuelve a tratarse de un director de cine, afincado en Canarias y subvencionado por el Gobierno”, aseguraba desde su Instagram.
En las capturas que la actriz muestra en la publicación, se muestra una conversación con Ravelo, en la que ella contaba tan solo con 15 años. “Durante muchos años me ha dado rabia no publicarlo, sobre todo al enterarme de testimonios, muchísimos más graves que el mío con respecto a Armando Ravelo, pero no pienso ponerlos en mi boca si no es una decisión de estas personas”. A la publicación de Koset siguió un reguero de muestras de apoyo y también de testimonios de mujeres y hombres del sector que acusan al director de acoso sexual y también de abuso en las relaciones laborales.
elDiario.es intentó contactar con el cineasta, pero no respondió ni a las llamadas ni al mensaje. Sí dio su testimonio a la agencia Efe y reconoce las conversaciones que mantuvo con Koset aunque niega que se pueda considerar violencia sexual. A esa agencia explicó que en esa época “estaba muy subido y se creía impune”, lo que, junto a una manifiesta adicción al sexo, que asegura haber superado tras ir a terapia, le llevó a “hacer mucho daño a muchas mujeres” con las que tuvo “relaciones duraderas”. En una entrevista con Radio Nacional de España anunció que deja el cine. “Me retiro del cine y de la vida pública, de la vida como la conocía hasta hace poco”, dijo.
Otras actrices y profesionales del mundo del cine también han denunciado las actitudes machistas de Armando Ravelo. Una de las mujeres que trabajó en el rodaje de su última película Érase una vez en Canarias (entre marzo y mayo de 2022) y que prefiere guardar el anonimato, explicó en conversación con este periódico que durante algún tiempo el cineasta la contactó con el objetivo de que trabajaran juntos en un proyecto que no llegó a materializarse. Luego, asegura que le insistía en que le diera su punto de vista sobre la película La Piel del volcán y le insistía “con tono casposo” para que se vieran en privado. “Cuando me di cuenta del abuso de poder, me sentí engañada y me enfadé”, asegura. La trabajadora remarca que le aclaró que no quería nada con él y que no estaba buscando nada más allá de lo profesional.
Tiempo después, esta mujer explica que en el rodaje de Érase una vez en Canarias trabajó más cerca de él y ella sentía “la necesidad” de “constantemente mantener todas las distancias posibles”. “Empecé a notar que, como mantenía esas distancias y no le permitía intimar o el flirteo, comenzó a decirme comentarios y peticiones que yo tacho de misóginas”. Entre esos comentarios, le llegó a pedir que no llamara la atención porque “distraía” a los chicos del rodaje. También indica que en las sobremesas Ravelo aseguraba que las mujeres se “exhiben” mucho en redes sociales y que siempre buscan la mirada de los hombres. Así mismo, recalca que el cineasta tenía un “comportamiento manipulador” y que generaba muchas situaciones incómodas. “Mi debilidad son las actrices”, asegura que le dijo.
“Querida, hemos tenido experiencias diferentes, pero sé lo que hay con esta persona”, señala en la publicación de Instagram de Koset la actriz Marta Viera, que afirma que lo descubrió “después de que me arrasara por dentro”. “Por suerte, una parte de mí se salvó y pude salir del agujero negro en el que estaba”, destaca. Otra profesional del cine destaca en la misma publicación que conoce bien al personaje (Ravelo) y que la respuesta era que “estaba celosa porque no me llamara más para trabajar” y que ella jamás trabajaría de nuevo para esa persona.
Begoña Ojeda fue una de las primeras actrices en apoyar la publicación en redes sociales de su compañera Koset: “Gracias, gracias, gracias por sacar esto a la luz. Eres ejemplo”. En la publicación, Ojeda predecía que con este testimonio “ayudaría a muchas a romper su silencio”.
La influencer Nicole Delgado también quiso mostrar su apoyo a la actriz en un comentario a la publicación: “El Gobierno canario lo acoge, pero el pueblo canario te abraza”.
Koset recibió en 24 horas numerosas muestras de cariño y respaldo entre las que se encuentran las de artistas de la tierra como el humorista Kike Pérez, el actor Víctor Ubara, la cantoautra Dácil Santana o el actor Abián de la Cruz.
También desde el mundo del periodismo canario, hay mujeres que quisieron dar un paso al frente, como el caso de Nora Navarro, jefa de Cultura del diario La Provincia, que compartió desde sus redes sociales una conversación mantenida con el director de cine y los motivos que la llevaron a decidir que nunca más cubriría una información relacionada con sus películas. “Además de soportar situaciones incomodísimas y violentas cada vez que intentaba hacer mi trabajo, también he tenido que soportar el acoso en redes desde que hace años me negué a volver a escribir una sola línea de esta persona. El miedo a que nadie te crea es atroz”.
Ravelo remarcó a la agencia Efe que cuando conoció en persona a Koset, pensó que era “adulta”, por lo que creyó que bromeaba con él cuando le dijo que era menor. También niega haber ejercido sobre ella violencia sexual, ni contacto físico alguno de esa índole, pero sí un comportamiento “reprobable” que entiende que se denuncie.
El cineasta subraya en dichas declaraciones que la terapia a la que se sometió en los últimos años lo ayudó “a tomar las riendas de su vida y a mejorar”, hasta el punto de conseguir tener “relaciones bonitas” con las mujeres que lo rodean, de ahí que ahora opte por afrontar con “honestidad” las consecuencias de denuncias. Así mismo, acepta que tras la denuncia de la actriz “no va a poder volver a trabajar en el cine en Canarias” y remarca que “ha dejado muchos cadáveres por el camino”.
Las acusaciones se enmarcan en una semana en la que varias actrices acusaron en el periódico El País al cineasta Carlos Vermut de violencia sexual. La Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA) mostró entonces su apoyo a las víctimas de acoso. “Nos preocupa especialmente el miedo de las víctimas a denunciar hechos ocurridos en el cine y el audiovisual”, subrayó el colectivo.
“El acoso sexual es una manifestación del abuso de poder y, allá donde el poder está en manos mayoritariamente masculinas, ese acoso se dirige contra las mujeres y es una de las expresiones de la violencia contra ellas”, dijo la asociación, que aseguró que las mujeres tienen esta herramienta a su disposición. De hecho, Koset ha instado en sus redes sociales a poner en conocimiento de esta asociación los casos que le han llegado a raíz de su denuncia al cineasta Armando Ravelo.
La Academia de Cine se solidarizó “con las víctimas de violencia sexual” tras las acusaciones contra Vermut
La Academia de Cine de España reaccionó a las acusaciones de tres mujeres contra el cineasta Carlos Vermut por supuesta “violencia sexual”. La institución, que en menos de dos semanas entregará los Premios Goya, no había expresado su opinión al respecto, como sí habían hecho otras como la Asociación de Mujeres Cineastas o la Unión de Actores. Lo hizo en un comunicado en el que “se solidariza con las víctimas de violencia sexual” y anuncia que “visibilizará la reivindicación del fin de los abusos en el cine en la próxima gala de los Premios Goya”.
“La Academia de Cine quiere mostrar su solidaridad con las víctimas de violencia sexual. Las actitudes machistas, los abusos de poder y la violencia contra las mujeres, que puede adoptar muy diversas formas, están presentes de manera transversal en toda la sociedad, y el sector audiovisual no es una excepción. Esta institución, que representa al conjunto de profesionales de la cinematografía en nuestro país, quiere condenar cualquier abuso y reafirmar su total repulsa ante dichos actos, así como su solidaridad y apoyo a las víctimas que denuncian dichos abusos y la necesidad de seguir denunciando cualquier situación de este tipo”, dice en su comunicado.
Tras su apoyo a las víctimas y la condena a cualquier abuso, subrayan que la próxima gala de los Goya se convertirá en un lugar para volver a realizar “la reivindicación de que la violencia sexual y los abusos de poder no tengan cabida en el mundo del cine ni en el conjunto de la sociedad española”. “En la gala de los Goya contaremos igualmente con un protocolo para prevenir y combatir cualquier posible caso de agresión y acoso sexual y/o de género”, añaden.
“Para la Academia de Cine es fundamental que la seguridad de las mujeres y la igualdad de género llegue a ser una realidad. El conjunto de profesionales que reúne la institución así lo demanda y lo exige. Ninguna mujer debería ser puesta en una posición de peligro, de inferioridad o de menosprecio, y ninguna violencia debería quedar sin respuesta”, zanjan en su escrito.
GS/JJ
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