Asalto al Planalto: Bolsonaro declaró que publicó medicado y “por error” un video sobre fraude electoral

Jair Bolsonaro, el expresidente brasileño, negó este martes haber sido el instigador de los actos golpistas del 8 de enero contra el mandatario Luiz Inácio “Lula” da Silva y, ante la Policía Federal, argumentó sorpresivamente que publicó en Facebook un video con informaciones falsas sobre un fraude electoral en su contra por “error” y bajo los efectos de un medicamento, según sus abogados.

Fue al declarar durante dos horas ante la Policía Federal brasileña, la cual lo convocó por haber posteado, tras el intento de golpe, un video donde se cuestionaban las elecciones de octubre de 2022 ganadas por Lula con informaciones falsas, en las que Bolsonaro nunca admitió la derrota.

El exmandatario declaró en la Superintendencia de la Policía Federal de Brasilia por orden del juez Alexandre de Moraes, integrante del Supremo Tribunal Federal, quien encabeza la megacausa que investiga la invasión al Palacio del Planalto, el Congreso y la sede de la Corte por parte de miles de simpatizantes bolsonaristas que pedían al Ejército intervenir para derrocar a da Silva.

Bolsonaro fue incluido en la investigación como supuesto autor intelectual, ya que luego del ataque, realizó una publicación en Facebook de un video donde se denunciaba como fake news un supuesto fraude de Lula en las elecciones de octubre. Ante la Policía Federal, declaró que publicó “por error” el posteo desde Orlando, así como bajo los efectos de medicamentos.

“Fue un error de Bolsonaro a la hora de ver y guardar un archivo para mirarlo posteriormente. Cuando le avisaron del error lo borró”, dijo Paulo Cunha Bueno, abogado del expresidente. Bolsonaro dijo que quería reenviar ese video por Whatsapp y no publicarlo en Facebook, argumentando que estaba bajo el efecto de sedantes, luego de haber sido internado en Estados Unidos por dolores abdominales.

El exministro de Comunicación Social Fabio Wajngarten, otro de sus abogados, aseguró que se presentó un video ilustrativo con el error cometido por Bolsonaro con dos clicks. El letrado aseguró que el expresidente, luego de los comicios, se recluyó en el Palacio de la Alvorada sin realizar manifestaciones a sus seguidores que acamparon en los cuarteles del Ejército de todo el país.

“La elección para el presidente Bolsonaro es una página del pasado. Eso fue lo que dijo. El presidente repudió los ataques”, sentenció Cunha Bueno. “El expresidente considera una página del pasado el período electoral. Él hizo la transición y dejó el país. Repudió los ataques como lo hizo por Twitter en la noche del 8 de enero”, insistió.

El exmandatario fue incluido en la investigación del Supremo Tribunal Federal, por la cual se detuvo a 1390 personas por haber invadido y financiado el asalto a los poderes, desconociendo la elección de octubre de 2022 ganada por el líder del Partido de los Trabajadores. En estos meses, el expresidente de 68 años dijo que no estaba de acuerdo con los destrozos, pero pidió la liberación de los detenidos por considerarlos “personas de bien”.

Ayer martes, Bolsonaro se preparó durante cuatro horas con su equipo de abogados y asesores para declarar este miércoles.

Bolsonaro es presidente de honor del Partido Liberal y vive en una casaquinta alquilada por esa fuerza política, que le paga un salario mensual de unos 7.000 dólares. Fue el primer mandatario brasileño en perder una reelección y, antes de entregarle el poder a Lula, abandonó el país el 30 de diciembre para pasar tres meses en la casa de un empresario amigo.

Cuestionó a la justicia electoral por el resultado de la elección, y se investigan sus movimientos para determinar si fue el autor intelectual de los campamentos frente a los cuarteles del Ejército que derivaron en el asalto a los poderes el 8 de enero, una semana después de la asunción de Lula de su tercera presidencia. El caso es instruido por el juez de Moraes, que también lo investiga en la megacausa de las fake news iniciada en 2020.

Es la segunda declaración del exmandatario en menos de un mes, ya que había acudido a la misma sede policial a ofrecer su versión en el caso del supuesto contrabando de joyas otorgadas a Brasil por el Gobierno saudita, y que Bolsonaro guardó para sí como si fueran regalos personales.

La declaración de Bolsonaro se dio en paralelo a la decisión del presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, de instalar una comisión mixta de investigación sobre los actos golpistas. Esta se formó luego de que renunciara el general retirado Edson Gonçalves Dias al Ministerio de Gabinete de Seguridad Institucional (GSI), debido a la difusión de imágenes en las que se lo ve pasivo al llegar al Palacio del Planalto el 8 de enero a la tarde, viendo cómo los vándalos circulaban impunemente por la casa de gobierno.

Dias, hombre de confianza de Lula hace dos décadas, dijo que no quiso esconder información al mandatario sobre lo ocurrido el 8 de enero y atribuyó esa responsabilidad a los miembros del gabinete de seguridad presidencial que venían de la gestión Bolsonaro. Según la grabación, los invasores recibieron agua de los militares y saludaron a los agentes del GSI durante los ataques que se centraban en la planta inferior, mientras Gonçalves Dias circulaba por la tercera planta del palacio.

La comisión parlamentaria deberá estar integrada por 16 diputados y 16 senadores y tendrá una duración de 90 días, prorrogables por igual período. Los miembros del colegiado serán designados por los líderes de los partidos. De todos modos, la disputa entre Gobierno y oposición está en la elección del presidente y el relator, quienes tienen el control de las investigaciones y la narrativa sobre los ataques a la institucionalidad y la democracia.

LC con información de agencia Télam