Bullrich reunió a la tropa de Juntos por el Cambio y arengó por su remontada electoral
Diez días después de la magra cosecha de votos en las PASO, Patricia Bullrich comenzó a asumir el liderazgo de Juntos por el Cambio. Reunió en un hotel porteño a todos los candidatos a cargos ejecutivos y legislativos de la fuerza opositora, y buscó transmitir como mensajes que se acabó la interna y que la oposición tiene “músculo político” propio para llegar a la Casa Rosada. Aunque hubo referencias implícitas, evitó mencionar a Javier Milei, con quien se imagina disputar un eventual balotaje presidencial, y cuestionó al Gobierno.
“El camino es con todos juntos. Dense la mano”, pidió enfáticamente Bullrich este jueves por la mañana en el hotel NH del microcentro. Un centenar de dirigentes la escuchaban, desde los distintos gobernadores que ostenta la oposición hasta mandatarios electos, más el nutrido grupo de espadas legislativas que tiene Juntos por el Cambio y quienes pugnan por entrar al Congreso desde el 10 de diciembre.
Su rival en las PASO Horacio Rodríguez Larreta fue de los principales participantes del convite, así como el correntino Gustavo Valdés, el jujeño Gerardo Morales y el mendocino Rodolfo Suárez. También participaron Jorge Macri –a las puertas de retener la Capital Federal para el PRO–, Alfredo Cornejo –muy cerca de volver al poder en Mendoza–, Claudio Poggi –gobernador electo de San Luis–, Marcelo Orrego –desbancó al peronismo en las provinciales de San Juan–, Rogelio Frigerio –salió primero en las PASO de Entre Ríos–, e Ignacio Torres –quien ganó también en Chubut–. Dio la nota el santafesino Maximiliano Pullaro, que faltó con aviso por la cercanía de las elecciones en su provincia: son el 10 de septiembre y tienen altas chances de ganarle al PJ.
Además se mostraron el candidato a vicepresidente de Bullrich, Luis Petri, su candidato en Buenos Aires, Néstor Grindetti, y sus potenciales figuras para el Congreso, como Cristian Ritondo y el radical Maximiliano Abad. Todos los aliados en la coalición cambiemita –PRO, UCR, la Coalición Cívica, el GEN, entre otros partidos menores– se mezclaron durante más de una hora en un ágape cerrado donde se ofreció un desayuno austero: café, jugo y medialunas. Bullrich prometió que si la oposición llega a la Rosada encabezará un “gobierno de coalición”, a diferencia de lo que fue Cambiemos en 2015.
“Le exigimos al kirchnerismo que cuide a los argentinos”, reclamó Bullrich en redes sociales al publicar una foto de su tropa unida. En la reunión también dijo: “Los únicos capaces de sacar esa matriz de poder perverso que el kirchnerismo generó como lógica de esclavización de la sociedad para mantener el poder, somos nosotros, es Juntos por el Cambio”.
Según supo elDiarioAR, la reunión tuvo un sentido más íntimo, casi en tono de catarsis, aunque Bullrich no hizo una “bajada de línea explícita” de cómo va a ser su campaña hacia las generales de octubre. Sabiendo que con su mera figura está lejos la victoria electoral –la marca quedó segunda, pero como candidata sacó la mitad de los 7 millones de votos que cosechó Milei–, transmitió la idea de que la remontada que necesita tiene que ser de abajo hacia arriba y con el aporte de cada dirigente en su pago chico. “El mejor jefe de campaña es cada uno de ustedes. Cada intendente, gobernador y legislador sabe mejor que nadie cómo hacer la campaña”, planteó la exministra de Mauricio Macri y de Fernando de la Rúa.
Con el 28% de los votos de las primarias –sumando lo que recogió Larreta–, en el comando bullrichista aspiran a superar con creces los 35 puntos, sobre todo en aquellos centros urbanos y localidades agrícolas del interior de país donde la marca fue muy acompañada en 2019 y que en esta oportunidad o votaron a Milei o se ausentaron. “Tenemos que recuperar el sur de Córdoba”, arengó Bullrich como ejemplo de uno de los puntos geográficos donde JxC fue deficitaria.
En el mitin no hubo ninguna exposición de datos ni una presentación hecha ad hoc con el mapa del país, que el 13 de agosto se pintó básicamente del violeta de La Libertad Avanza. Bullrich no mencionó a Milei, y tampoco lo hicieron los otros oradores. La candidata sí adelantó que no impulsará la dolarización que vende el libertario como su caballito de batalla.
Voy a poner todo lo que tengo para que Patricia Bullrich sea presidente
También definió que Ritondo sea una especie de jefe de campaña de todos los legisladores cambiemitas, tanto los vigentes como los que están en campaña. “Los quiere a todos en movimiento y ocupados en sumar votos”, recogió este medio cerca del diputado.
La provincia de Buenos Aires es un bastión clave para las generales, por eso Grindetti, Ritondo y Abad, junto con otras figuras en la lista legislativa bonaerense, como Miguel Pichetto, Karina Banfi y María Eugenia Talerico, hicieron un aparte en la reunión para conversar pasos a seguir. En ese punto será fundamental el aporte del larretista Diego Santilli, que está a la espera del escrutinio definitivo para sumarse a la campaña de Bullrich.
Larreta: “Voy a poner todo lo que tengo para que Patricia Bullrich sea presidente”
“Estoy a disposición”, dijo Larreta a su turno, siguiendo la línea que más temprano había expuesto en el Council of the Americas, donde también había estado temprano la candidata. “Voy a poner todo lo que tengo para que Patricia Bullrich sea presidente”, había planteado el jefe de Gobierno frente a los empresarios norteamericanos. Una afirmación que recogió pocos aplausos.
Las fuentes consultadas coincidieron en que la reunión que encabezó Bullrich fue en “buenos términos” y en clima “conciliador”. “Juntos por el Cambio va a competir y tratar de ganar la Presidencia, y eso significa ganarle al kirchnerismo y también a Javier Milei”, planteó Jorge Macri tras la reunión. “Patricia plantea una salida en paz, en orden, sin conflictos ni peleas. Ya tenemos suficiente en el país. Queremos ordenar la Argentina y la economía, y ella tiene el coraje para hacerlo”, aseguró el diputado Luciano Laspina, uno de los principales referentes en materia económica de Bullrich.
Justamente este viernes la candidata encabezará una reunión específica con sus referentes en materia económica. Pugnan por ser nominados como su potencial ministro Laspina y Carlos Melconian, presidente de la IERAL en la Fundación Mediterránea. Luego de su serie de conciliábulos, Bullrich tiene en agenda la primera semana de septiembre volver a sus recorridas, como anticipó una fuente: “Ya volvemos al barro de la campaña”.
MC/JJD
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