Perfil
Guillermo Pérez Roldán, auge y caída de un tenista extraordinario
Guillermo Pérez Roldán, también conocido como “Rocky”, nació en Tandil, provincia de Buenos Aires, un 20 de octubre de 1969. Fue jugador profesional entre fines de los 80 y principios de los 90. Ya en sus primeros años como profesional y apenas un adolescente, alcanzó el puesto nº13 del ranking mundial. Estuvo entre los mejores 50 de la ATP por 7 años consecutivos.
De chico, inició su camino en el tenis en el Club Independiente de Tandil, de donde también salieron otros tenistas de escala mundial, como Juan Martín del Potro, Pico Mónaco o Mariano Zabaleta. Ahí, Raúl Pérez Roldán, su padre y fundador de la escuela de tenis, fue su profesor, para luego ser su entrenador y representante.
A los 13, Pérez Roldán ya estaba entre los mejores de la Argentina, sumando un gran número de campeonatos junior. Internacionalmente, fue campeón dos veces del torneo junior de Roland Garros, en 1986 y 1987, siendo el primer argentino en lograrlo. No es común repetir títulos en junior, y eso ya vislumbraba una gran promesa en el joven tenista.
Como jugador profesional desde 1986, ganó 9 títulos en toda su carrera, siempre en individuales. Su especialidad fueron las canchas lentas, es decir, las de polvo de ladrillo o arcilla. Esto es porque las pelotas rebotan más alto y más lento, lo que le da la posibilidad al jugador de llegar a dar una respuesta antes del segundo rebote.
Solo en su primer año, Pérez Roldán obtuvo tres títulos: en el Torneo de Múnich -el cual volvería a ganar un año más tarde-, en el Torneo de Atenas y en el Torneo de Buenos Aires (hoy Argentina Open). En julio de ese año, también llegó a la final del Abierto de los Países Bajos.
1988 sería uno de sus mejores años, cuando llegó a los cuartos de final de Roland Garros, el Abierto de Francia, para caer ante el estadounidense Andre Agassi. Paradójicamente, Agassi, uno de los mejores tenistas del mundo, también fue víctima de abusos de su padre, quien lo obligaba violentamente a jugar al tenis. Aunque Agassi terminó odiando el deporte, “Rocky” ha dicho que todo lo contrario, porque él sabía dónde estaba lo que le hacía tanto mal.
Participó varias veces del Gran Slam francés, pero luego de los cuartos, lo más lejos que llegó fue a los octavos de final en 1989 y 1990. En 1988 también disputó el Abierto de Estados Unidos (mejor conocido como US Open), donde cayó en la tercera ronda y, un año más tarde, en la primera. No jugó otros campeonatos Grand Slam fuera del de Estados Unidos y Francia.
Aquella actuación en los cuartos de Roland Garros, junto con su llegada a la final del Masters de Roma, le mereció el premio Rolex Rookie (en castellano: novato) de ese año. Desde entonces, formó parte del equipo argentino en la Copa Davis hasta 1993.
Sus otras coronas fueron en el Torneo de Palermo en 1989, y en dos ocasiones donde ganó dos veces consecutivas: en San Marino en 1990 y 1991 y en Casablanca en 1992 y 1993. En total, llegó a jugar 11 finales individuales y 3 en dobles.
Sin embargo, a principios de los 90, su carrera se complicó por lesiones. Compitió en el circuito hasta 1993, cuando tenía 24 años. Tuvo varias apariciones, como en varios torneos en 1996 y algunas apariciones puntuales en 1998, 2004 y 2006, cuando ya tenía 37 años. De todos modos, su retiro fue en 1998, debido a una lesión crónica en su muñeca derecha. Es diestro.
Después de su retiro, fue director deportivo de la Escuela Nacional de Menores entre 1994 y 1995. De bajo perfil, se fue desarrollando como entrenador en las canchas de Italia y Chile. En el 2000, recibió el Premio Konex como tenista de la década, compartido con Gabriela Sabatini y Mariano Zabaleta, entre otros.
Hace dos años, rompió el silencio en una entrevista para La Nación, donde habló de su retiro y reveló la violencia física, psicológica y económica que ejercía su padre sobre él y su familia. Ahora, estrenó una serie documental en Star+: “Guillermo Pérez Roldán: Confidencial”, donde cuenta su historia.
Hoy en día, con 52 años, es padre de dos hijas y un hijo, mientras está a la espera del cuarto. Trabaja para la Federación Británica de Tenis como asesor, donde acompaña a jugadores jóvenes que quieren tener una carrera profesional. Vive en Santiago de Chile.
LC
0