La ley ómnibus se discute en el Congreso y Milei enfrenta su primera gran batalla
Hoy desde las 14, en el Anexo C de la Cámara de Diputados, empezará la primera gran batalla política del Gobierno: el tratamiento parlamentario de la ley ómnibus que contiene un ambicioso paquete de reformas al Estado. La iniciativa es, junto al mega DNU, la mayor apuesta de Javier Milei para sus cuatro años de gestión. Implica una fuerte desregulación de la economía, el otorgamiento de “superpoderes” al Presidente, la privatización de empresas públicas, una inédita reforma electoral, blanqueo de capitales y hasta cambios relacionados con el Código Civil y el cálculo de las jubilaciones.
Por el amplio abanico de temas que toca el proyecto de ley, el oficialismo dispuso que la discusión se dé en el ámbito de tres comisiones, aunque podrían haber sido muchas más: Legislación General, presidida por el libertario Gabriel Bornoroni; Presupuesto y Hacienda, encabezada por José Luis Espert –hasta ahora miembro de Juntos por el Cambio–, y Asuntos Constitucionales, liderada por Nicolás Mayoraz, también de La Libertad Avanza.
Pese a la extensión del texto –tiene 351 páginas y 664 artículos– y a que se espera la exposición de ministros, el debate será acotado. El oficialismo abrió la agenda para hoy por la tarde y mañana con una jornada maratónica: desde las 9 a las 20. Extraoficialmente también se analiza convocar a una tercera jornada de discusión para el jueves. Con todo, la intención en LLA es apurar el dictamen la semana próxima y que se vote el jueves 25.
Si abren el recinto es para que la ley se apruebe, pero a priori parece poco probable que el texto tenga media sanción tal como fue escrito. El oficialismo no tiene asegurados los votos por la relevancia y la heterogeneidad de los asuntos que incluye la afamada ley de “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”. Por lo pronto Milei ya avisó que la ley podría tener “mejoras, pero no cambios”. Incluso llegó a denunciar que hay “diputados coimeros” buscando modificaciones.
Día 1
La jornada de este martes está cargada de expectativa porque los movimientos del oficialismo en la previa fueron inéditos. La convocatoria que hizo LLA incluyó una dirección de correo electrónico a la cual los diputados podían enviar inquietudes y preguntas hasta el lunes a las 20 para que sean respondidas por los expositores. Pero hasta este lunes por la tarde no se sabía qué funcionarios se acercarían al anexo de la Cámara baja. Otra novedad: se dispuso que sus intervenciones podrían ser vía Zoom.
El lunes finalmente se confirmó oficialmente que el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, irán este martes, de 14 a 17 y de 17 a 20, respectivamente. También se informó que concurrirán la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el de Interior, Guillermo Francos; el de Infraestructura, Guillermo Ferraro, y la de Capital Humano, Sandra Pettovello. Será en las jornadas del miércoles y el jueves, con horarios a confirmar.
elDiarioAR supo de fuentes parlamentarias que la intención de la participación de casi todos los ministros es que sea acotada a los estrictos artículos de la ley que tienen que ver con sus carteras.
La presencia de Rodríguez Chirillo no se explica solamente por su cargo —secretario de Energía— sino, sobre todo, porque uno de los mentores de la reforma estructural del Estado junto a Federico Sturzenegger, exfuncionario macrista que no tiene cargo formal.
Al cierre de esta nota en el oficialismo reinaba cierta zozobra sobre la estrategia política. “Yo no lo tengo en agenda”, indicaron a este medio al lado de uno de los ministros más importantes del Gobierno. El lunes por la tarde estaba prevista una reunión de los presidentes de las comisiones para definir detalles al respecto y la agenda de Omar de Marchi, el “puente” entre el Ejecutivo y el Legislativo, aparecía “tapada”.
En público desde el oficialismo buscaron dar señales de optimismo y cerrar filas ante la posibilidad de que la ley sufra modificaciones para su votación. “No se negocian el norte ni las ideas, pero sí se aceptan sugerencias para mejorar el camino hacia la libertad de los argentinos”, expresó el lunes el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. “Vamos a trabajar para sacar el 100 por 100” de la ley ómnibus “antes de fin de mes”, adelantó por su parte el jefe del bloque de diputados libertarios, Oscar Zago.
Los cambios y las espadas
En la cúpula de Diputados, por lo bajo, admiten que habrá artículos que sí o sí sufrirán nuevas redacciones. “Habrá cambios de forma y pulidas”, apuntó una voz al tanto de las negociaciones políticas. Uno de los puntos que en LLA admiten que se acortará será la delegación de facultades especiales a Milei: en vez de que sea por dos años prorrogables por dos más, sería por un año prorrogable por otro más. “Yo no hablo de cambios sino de correcciones”, dijo otro operador libertario.
Paradigmático es el ruido que generó el articulado sobre la ley de pesca: “Está mal”, admitió rotundamente la fuente consultada, luego del ruido de todo el sector por lo que implicaría su desregulación. Otras economías regionales están en jaque por la imposición de retenciones, como la del limón en Tucumán que dio cuenta elDiarioAR. Incluso se estipula una suba en la alícuota de la soja, un golpe al corazón del agro. El lunes el ministro del Interior, Guillermo Francos, se reunió con funcionarios de varias provincias para “clarificar” el porcentaje de corte de los biocombustibles.
También hay críticas sobre la privatización de todas las empresas públicas, la fórmula de movilidad jubilatoria en un contexto de escalada inflacionaria sin freno y la reforma electoral, que abarca desde la eliminación de las PASO a la supresión de la elección de diputados por las minorías. Hay un sinfín de reformas temerarias incluyendo aspectos sociales y culturales. La ley ómnibus incluye además la ratificación del mega DNU presidencial, que si bien aún no se conformó la comisión bicameral para su tratamiento parlamentario hoy está vigente, salvo su capítulo laboral suspendido por la Justicia.
Frente a semejante iniciativa, LLA tiene apenas en este tramo de la discusión parlamentaria 38 de los 257 diputados; o sea un 15% del total de bancas. Una situación que obliga a Milei a negociar cualquier votación por más que no quiera. A estos legisladores oficialistas puros pueden sumárseles los 37 del PRO, los 34 radicales y otros 18 de espacios provinciales proto-oficialistas que estarían dispuestos a acompañar en grandes rasgos la iniciativa.
Pero la suma llega a 127, lo que significa que no llegan al quórum ni a aprobar, por ejemplo, las modificaciones al sistema electoral, que también requieren la mayoría absoluta de los miembros del cuerpo: 129 de 257. Ayer la UCR le envió un informe con un “semáforo” a Menem donde explicitaron qué artículos apoyan, rechazan y cuáles piden modificar.
Posiblemente, la llave para destrabar estos asuntos –suponiendo que todos los radicales y todos los integrantes del PRO acompañen, lo que no está garantizado– podría ser Hacemos Coalición Federal, el bloque de 23 diputados que preside Miguel Pichetto, y que se paró en la vereda de enfrente del oficialismo y de los planes de Milei (sobre todo por sus formas). Los 107 diputados restantes son de Unión por la Patria (102) y del Frente de Izquierda (5), con los que el gobierno de Milei ni piensa contar. “El kirchnerismo es una máquina de impedir”, acusó Zago.
MC/JJD
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