El oficialismo consiguió demorar una semana la citación a funcionarios de Milei para que expliquen el súper-DNU
La Libertad Avanza retrocede. La semana pasada, como anticipó elDiarioAR, se había comprometido a citar al ministro de Economía, Luis Caputo, y al jefe de Gabinete, Nicolás Posse, entre otros funcionarios, a la comisión bicameral de Trámite Legislativo, que es la encargada de aprobar o rechazar los decretos presidenciales, justamente para que expliquen los alcances del DNU 70/2023, dictado por el presidente Javier Milei. Pero esta semana cambiaron de opinión y decidieron que no lo harían. El argumento: que primero deben tratarse los 136 decretos pendientes de evaluación, que fueron dictados por Alberto Fernández (Frente de Todos) y Mauricio Macri (Cambiemos). Finalmente, esta tarde se decidió por mayoría que el martes 12 se tratarán los DNU pendientes de las gestiones anteriores —con una reunión de asesores a quienes se les encargará la tarea de ordenar el listado por importancia— y que el jueves 14 sí empezarán a asistir funcionarios de la actual gestión por el súper-DNU de Milei. Es decir que el oficialismo consiguió demorar una semana la visita de los representantes del Poder Ejecutivo.
El DNU 70/2023, dictado por Milei el 20 de diciembre último y con vigencia desde el 29 de diciembre, tiene 366 disposiciones, entre las cuales se destacan la derogación de varias leyes (como la de Alquileres) y la posibilidad de que las prepagas aumenten su cuota lo que quieran y cuando quieran.
Salvo los artículos que fueron suspendidos por la Justicia (por ejemplo, todos los referidos a la reforma laboral), el mega-DNU de Milei se encuentra en plena vigencia. Por eso, por ejemplo, en lo que va del gobierno de Milei las prepagas ya pudieron aumentarles la cuota a sus afiliados hasta un 160% acumulado (40% en enero, 30% en febrero, 23% en marzo y 16% en abril), más que la inflación.
De acuerdo con la ley, un DNU sólo pierde vigencia una vez que es rechazado por los plenos de ambas cámaras. Pero antes, debe ser enviado a la comisión bicameral de Trámite Legislativo, integrada por 8 diputados y 8 senadores, que se encarga de dictaminar sobre su validez (es decir, si no legisla en materias prohibidas por la Constitución y si cumple con los requisitos de necesidad y urgencia). Esta comisión tiene un plazo de 10 días para expedirse. Dicho plazo ya está totalmente vencido y, por lo tanto, el DNU debe ya tratarse de inmediato en los recintos.
Como la política es el arte de lo posible, ya han pasado más de dos meses desdes su publicación en el Boletín Oficial y ni la bicameral ni los plenos de ambas cámaras se han abocado a tratar el DNU de Milei.
La bicameral, que no se reunió ni en 2022 ni en 2023, tiene pendientes de tratamiento un centenar de decretos de los dos antecesores inmediatos de Milei, Fernández y Macri.
En la reunión de esta comisión realizada en la tarde de este jueves, el oficialismo (entendiendo por tal a los legisladores de La Libertad Avanza y a los del PRO) pidió que el tratamiento de los decretos sea cronológico, en el afán de demorar la visita de Caputo, Posse y otro puñado de funcionarios, y de que el DNU de Milei no sufra ningún pronunciamiento del Congreso.
El dictamen de la bicameral no es vinculante y, como se dijo, los decretos solamente pierden vigencia una vez que son rechazados por los plenos de ambas cámaras. Pero un dictamen de comisión de rechazo al DNU significaría —aunque no pierda vigencia— una derrota política, un indicador del clima político y, por lo tanto, un anticipo de lo que podría ocurrir después, en los recintos. También, en la Justicia, donde algunos tribunales ya suspendieron la vigencia de algunos artículos del instrumento.
Al final, a propuesta del diputado Nicolás Massot, del variopinto bloque Hacemos Coalición Federal (que conduce Miguel Pichetto y es considerado la “oposición dialoguista”), la bicameral decidió dedicar los martes a los DNU viejos y los jueves, con funcionarios nacionales citados y juristas invitados, al súper-DNU de Milei.
“Propongo que se convoque a una reunión de asesores con el fin de que clasifiquen y propongan un plan de trabajo de todos los DNU ya vencidos, que son de todas las administraciones”, dijo Massot al explicar su moción, en alusión al orden de los decretos, ya que algunos devinieron abstractos, otros no son lo suficientemente relevantes y otros tiene efectos jurídicos que ameritan su tratamiento anticipado. Agregó: “El martes sería la reunión de asesores y que el jueves, que estamos como siempre obligados a reunirnos a las 14 horas, sea la citación de los funcionarios”. La moción fue aprobada por mayoría y se levantó la sesión de la bicameral.
A pedido de Unión por la Patria, también se invitará a constitucionalistas para que den sus argumentos jurídicos sobre la validez del DNU de Milei.
Sobre el final del encuentro, Lombardi había cuestionado a sus colegas de Unión por la Patria por insistir en la presencia de funcionarios de Milei cuando durante el gobierno del Frente de Todos los funcionarios de aquella administración no concurrieron a dicha comisión a explicar los decretos. “Comparto el criterio de que los funcionarios tienen que venir, tienen que explicar. Pero nunca en la gestión de Alberto Fernández vino ningún funcionario. Jamás. Entonces, ¿cómo se rasgan las vestiduras? ¿Saben por qué no vinieron a la comisión bicameral? Porque no se reunió, no la reunían, muchachos”, protestó.
A la salida del encuentro, el senador kirchnerista Mariano Recalde dijo: “Podría decir que no pasó nada, lamentablemente siguen las maniobras dilatorias para estirar el tratamiento del DNU y no llevarlo al recinto, que es lo que corresponde, lo que dice la Constitución, la ley, que no están cumpliendo, que ya pasaron los 10 días que tenía esta bicameral para tratarlo y que si no emitió dictamen tiene que ir al recinto. Así que estamos esperando que la vicepresidenta [Victoria Villarruel] se digne a cumplir con la ley, a cumplir con el reglamento, y convoque a sesión especial, como le hemos pedido ya una enorme mayoría de senadores, y podamos tratarlo. Si están los números, se rechazará y si no están los números, quedará aprobado”.
Durante la reunión de la bicameral, y como el oficialismo planteaba la necesidad de debatir primero todos los DNU anteriores no tratados, Recalde propuso, con ironía, que se invitara “a funcionarios de Menem”, porque, total, “son los mismos” que integran el gobierno de Milei ahora. De inmediato un senador que estaba cerca le respondió: “O a Scioli...”.
“Estuvo bien”, reconoció Recalde sonriendo. Touché.
JJD
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