Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
Medios

“¡Viva la libertad, carajo!”: Sturzenegger y Cordero defendieron su reforma laboral con una columna en La Nación

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, y el secretario de Trabajo, Julio Cordero.

elDiarioAR

26 de septiembre de 2024 12:58 h

0

Después de dar a conocer la reglamentación de la reforma laboral en las últimas horas a través del decreto 847/2024, en el que el Ejecutivo destacó que “el profundo cambio generará más oportunidades para el empleo registrado en el sector privado a través de la flexibilización de una serie de condiciones” y que incluye un blanqueo de impuestos al trabajo, mayores facilidades para la contratación de empleados independientes y la posibilidad de acordar alternativas para el cese laboral que conformen tanto a los trabajadores como a las empresas, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, y el secretario de Trabajo, Julio Cordero, eligieron al diario La Nación para dar sus argumentos en defensa del decreto que firmó el presidente Javier Milei.

Allí, en una columna que lleva sus firmas, los funcionarios destacan que los artículos del capítulo laboral de la Ley Bases que se reglamentaron “contienen una reforma que el país necesitaba en forma urgente, ya que el empleo privado en el sector privado no creció en los últimos 12 años”.

Para Sturzenegger y Cordero, “lamentablemente, la discusión sobre este cambio normativo se vio afectada por un error conceptual que se repite en muchos debates en la Argentina: la idea de que las reformas son conflictos de suma cero donde, si uno gana, el otro pierde”, al tiempo que plantean que existe un “marco teórico” que “se reitera en las falsas antinomias de agro o industria, modelo agroexportador o de sustitución de importaciones y Buenos Aires versus interior, entre tantos otros”. “La Argentina no puede salir del esquema de pensamiento que nos legó Sarmiento en el Facundo: civilización o barbarie”, sentencian.

Además, destacan que el presidente Javier Milei “tiene ideas radicalmente diferentes porque cree que la resolución de los conflictos no tiene que ser de suma cero. En realidad, la interacción económica en libertad logra que la resolución de conflictos se produzca en un juego de suma positiva, en el que todos ganan. El beneficio mutuo es la base de cualquier intercambio voluntario entre personas”.

En cuanto a la reforma laboral que aprobó el Congreso, los funcionarios remarcan que favorecerá “la generación de puestos de trabajo genuinos en el sector privado” y que el Gobierno no busca “beneficiar o a los empresarios o a los trabajadores, sino encontrar un sistema positivo para ambos” porque “el tándem empresa-trabajador tiene todo para ganar” y “mejores relaciones laborales permitirán más trabajo y reducir la industria del juicio”.

En la columna, destacan también a “Ronald Coase, Premio Nobel de Economía en 1991”, como “nuestro economista de cabecera”, cuyo “espíritu” fue clave para “armar la reforma laboral de la Ley Bases”, que “no la va a definir el Gobierno, sino que empresarios y trabajadores deberán juntarse para definir ese marco” y, “entre ellos, deberán elegir su régimen laboral, los mecanismos, pagos y modalidades para gestionar la interrupción de las relaciones laborales”.

De acuerdo a su visión, los protagonistas de cada sector “armarán su propio régimen laboral, aunque con una condición: si llegan a un acuerdo que no es conveniente para empresas y trabajadores, estos pueden decidir no suscribirlo. Este factor es clave para asegurarse que el esquema mejora la situación de ambos actores”. Y agregan que esta situación será “posible porque, en la actualidad, las relaciones laborales están plagadas de costos ocultos e incertidumbres que alimentan la industria del juicio. De modo tal que si lo que se acuerda reduce la litigiosidad, tienen un amplio marco para mejorar la situación de ambas partes”.

 Y, como ya lo hicieran en reiteradas oportunidades desde el Gobierno, destacan que se trata de “un esquema similar” que “ya tiene el antecedente del acuerdo del gremio de la construcción (Uocra) con las empresas del sector. En una industria donde la rotación laboral es habitual, el sistema generó un mecanismo de compensación que llevó la litigiosidad casi a cero”, aunque aclaran también que hay “otras industrias, con características diferentes”, que “deberán organizar su sistema con otras reglas, e inclusive podrán ofrecer un menú de opciones, por ejemplo, distinto para diferentes clases de empresas o geografías; quizás, acuerden que lo único que quieren hacer es definir con mayor certidumbre las contingencias laborales. Lo cierto es que el esquema queda totalmente liberado a lo que puedan diseñar”.

En su conclusión, los funcionarios aseguran que Milei “acaba de diseñar una reforma que le devuelve la libertad a las partes para construir su propio régimen laboral con la única restricción de que sea de mutuo acuerdo. La economía es un juego de suma positiva y, si confiamos en la libertad, podremos aprovechar todo nuestro potencial”. Y cierran al estilo presidencial: “¡Viva la libertad, carajo!”.

Sturzenegger también explicó la reforma laboral en X con más detalles

“El Decreto 847/24, firmado por el presidente Javier Milei, reglamenta el capítulo laboral de la Ley Bases. El capítulo permite un blanqueo laboral, elimina la presunción de relación de dependencia en la contratación de servicios, implementa una simplificación en el registro laboral, flexibiliza las licencias por maternidad, elimina las multas en los juicios por indemnización, permite la contratación de trabajadores independientes, impone una cláusula antibloqueo y permite el diseño de sistemas de cese.

Estamos ante el cambio más importante en las relaciones laborales en años. Veamos. Las multas por registraciones laborales defectuosas hasta triplicaban los costos de una indemnización por despido. Fue impuesto con la mejor intención en 1992 con la idea de que castigar la mala registración obligaría a formalizar el empleo. Treinta años después es claro que no funcionó.

La posible aplicación de multas aumentó mucho el riesgo laboral y el cobro de una posible multa operaba para el trabajador como un incentivo a la mala registración. El resultado: 50% de los trabajadores en la informalidad. La eliminación de las multas busca desandar esta política, bien intencionada, pero que no funcionó.

El articulo 97 de la Ley Bases autoriza la contratación de hasta tres trabajadores independientes sin riesgo de que la misma sea considerada una relación laboral. Esto debería ayudar a formalizar a pequeños empresarios. Se reglamenta que esto se implemente en el marco jurídico del monotributo.

El articulo 94 de la Ley Bases define como justa causa de despido al bloqueo (total o parcial), y no solo cuando afecta a los trabajadores que no quieran participar de las acciones de fuerza, sino que también cuando afecta a proveedores y clientes.

Las acciones de protesta laboral, en particular el uso del derecho de huelga, están protegidos, pero esta ley protege al que QUIERE trabajar. El sistema de cese permite un rediseño completo de la relación laboral porque permite repensar las condiciones de indemnización que son el centro de la industria del juicio y la incertidumbre laboral.

Lo interesante es que lo que hace el Articulo 96 de la Ley Bases es dar libertad a las partes de un convenio colectivo para definir su propio régimen. Esto puede ser simplemente definir con mayor precisión las situaciones de despido, armar fondos individuales o colectivos, o contratar seguros para hacer frente a las contingencias.

El sistema podrá ofrecer un menú de opciones, diferente para un tipo de empresas o por región del país. El gobierno no define la reforma sino que la reforma la definen los actores de cada mercado. Con una condición: lo que se acuerde a nivel convenio no es obligatorio para nadie. Esto nos asegura que la reforma que se decida a nivel de convenio solo prosperará si encuentra un mecanismo que beneficie tanto a trabajadores como empresas.

El presidente Javier Milei nos conminó a diseñar una reforma que fuera buena para todos los actores del mercado laboral. “Si no saben hacerlo no hagan nada”, nos dijo. Nuestra solución fue esta: darle libertad a las partes para que pueda cada sector encontrar la mejor solución.

Acá, además, digamos todo, hay un tercero en discordia: los costos de la incertidumbre y la industria del juicio. Justamente, al reducir la incidencia de estos costos es que trabajadores y empresarios pueden encontrar un sistema mejor para ambas partes. Todos tenemos en mente el exitoso sistema de la UOCRA.

Debiera ser evidente que otros sectores, con otras características, no tienen que replicar ese esquema. Pero sí tienen que tener la misma inteligencia y creatividad que tuvo el sector de la construcción para encontrar un sistema superador al actual.

Esta reglamentación es el trabajo conjunto de un gran número de personas. En colaboración con el Secretario de Transformación Maximiliano Fariña, del Ministerio de Desregulación, en primer lugar, el Secretario de Trabajo Julio Cordero con todo su equipo, la Ministra de Capital Humano Sandra Pettovello, el equipo de José Rolandi, y María Ibarzábal que llevaron la Ley Bases a buen puerto y todo el equipo de la Secretaria Legal y Técnica bajo la conducción de Javier Herrera Bravo.

Esperamos que este baño de libertad en la definición de las relaciones laborales redunde en mayor empleo, en mayor empleo formal y en un mercado laboral más ágil en beneficio de trabajadores y empleadores. VLLC!“

IG

Etiquetas
stats