Poco consenso y muchas chicanas: lo que dejó el debate de candidatos a jefe de Gobierno
“Tu problema es que no te interesa gobernar CABA, te interesa tener seguidores en las redes sociales”. Así cuestionaba Leandro Santoro al legislador porteño de La Libertad Avanza, Ramiro Marra durante el Debate Ciudad. Esta no fue la única chicana que se escuchó este miércoles por la noche. Por el contrario, en el encuentro de los cuatro candidatos a jefe de gobierno de CABA abundaron las acusaciones cruzadas y, en algunos casos, brillaron por su ausencia las propuestas concretas para resolver los principales desafíos que mantienen en vilo a la ciudadanía porteña.
Con alocuciones vacías de contenido programático, Marra siguió la línea de su líder a nivel nacional, Javier Milei, y buscó polarizar fundamentalmente con el candidato de Unión por la Patria. Entre cruces con Santoro y la postulante del Frente de Izquierda, Vanina Biasi ─y confiado en un eventual balotaje contra Jorge Macri─ evitó confrontar con el ex intendente de Vicente López y actual ministro de Gobierno de la Ciudad, quien sí fue señalado con mayor vehemencia por los otros dos dirigentes presentes.
Una de las principales críticas al primo del ex presidente de Juntos por el Cambio llegó de la mano de los recientes negocios inmobiliarios y grandes construcciones emplazadas en la zona norte y el sector de la costanera. “El macrismo le entregó la ciudad a Calcaterra, Caputo y Elsztain. Esta es una ciudad de especuladores inmobiliarios”, indicó Biasi al momento de exponer en el bloque sobre Vivienda, Ambiente y Desarrollo Productivo.
Este fue solo uno de los cuatro ejes que se discutieron este miércoles por la noche. Los postulantes a la jefatura de gobierno de CABA también abordaron Infraestructura, Gestión urbana y código urbanístico; Educación, Salud, Cultura, Desarrollo humano, Género y diversidad; y Autonomía, sistema político, Justicia y Seguridad. Y entre tantas chicanas y ataque personales, lograron ver la luz algunos diagnósticos y políticas de consenso para estas cuestiones.
Un código urbanístico con los días contados
Tic tac. El tiempo para que se derogue el código urbanístico de la Ciudad, aprobado en 2018, es cada vez menor. Con excepción de Marra ─que guardó silencio respecto al tema─ todos los candidatos señalaron la necesidad de modificar la normativa que regula los usos del suelo del espacio público y privado en el distrito y, al día de hoy, genera más perjuicios que beneficios.
Para Jorge Macri, el código urbanístico trajo graves consecuencias para varios sectores residenciales como Villa Devoto, Villa Urquiza y Belgrano R y llamó a cuidar el perfil de cada uno de los barrios con sus respectivos rasgos identitarios. Otra de sus banderas de campaña en materia de infraestructura plantea “dirigir el desarrollo al sur de la Ciudad de Buenos Aires”. Con este objetivo, y mechando con parte de su proyecto educativo, presentó su plan de construcción de un polo de oficios en el autódromo y la villa olímpica de la Comuna 8.
El ministro de Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta también anunció obras para mejorar la circulación y el tránsito. En particular, se centró en el tendido ferroviario y aseguró que, en caso de ganar las elecciones del 22 de octubre, pondrá en marcha la construcción de un viaducto para el tren Sarmiento.
Otro de los candidatos que puso énfasis en el transporte fue Leandro Santoro quien puso sobre la mesa una alternativa que desde hace años se está evaluando: la extensión de la red de subtes para maximizar la conexión. “Mi propuesta es llevar el subte a todos los barrios, accesible para las personas con discapacidad, sin asbesto y que funcione las 24 horas”, detalló.
Y, por supuesto, la odisea de conseguir un techo llegó a los estudios del Canal de la Ciudad. Mientras Marra abogaba por una eliminación total de la Ley de Alquileres, el Frente de Izquierda y Unión por la Patria presentaron una política que bien podrían haber diseñado en conjunto, pese a otorgarle nombres diferentes: el establecimiento de un “plan de viviendas sociales” o un “parque público de viviendas”. De manera similar, defendieron la regulación de los arrendamientos temporales mediante plataformas como AirBnB y la necesidad de acabar con las viviendas “ociosas”.
Un primer acercamiento a la agenda joven: salud mental
Un reclamo que resuena entre la juventud es la necesidad de adoptar un enfoque sanitario integral que contemple la salud mental. Y en el Debate Ciudad, los candidatos se expresaron a favor de esa bandera por unanimidad. Biasi, fue, sin embargo, la que más énfasis puso sobre esta cuestión y relató la realidad del sistema público: hoy, los hospitales cuenta con “psicólogos concurrentes”, lo que, según explicó, implica que muchos de ellos trabajan ─para ponerlo en buenos términos─ ad honorem.
Su situación laboral no es la única que debería revisarse: la candidata del Frente de Izquierda subrayó, además, la necesidad de profesionalizar la enfermería para mejorar el salario de aquellas personas que optan por esta carrera. Se trata de una manera de, apelando al lenguaje de Santoro, “dignificar el sistema de salud”.
Para que esto último ocurra, Macri levantó su plan para crear un sistema de atención paralela y complementaria. Bajo la lógica de dejar a los hospitales las urgencias y descomprimir las guardias que hoy están colapsadas, el postulante de Juntos por el Cambio explicó a la ciudadanía que abrirá un centro de diagnóstico de alta complejidad y otros 6 institutos de mediana complejidad distribuidos por distintas comunas.
Déficit educativo y el debate sobre cómo invertir el dinero
El consenso entre los candidatos se limitó a los dos ejes anteriores, para luego dejar lugar a amplias disidencias. Educación fue uno de los principales ámbitos donde estos chispazos se hicieron sentir.
Esta sección del debate revitalizó una disputa de larga data sobre la primera infancia y el acceso a la instrucción en la Ciudad de Buenos Aires. “Hoy garantizamos la escolaridad desde salita de tres y hay vacantes para los chicos”, sostuvo el ex intendente de Vicente López, al ser increpado por Biasi sobre la falta de jardines maternales en el distrito.
Este último punto tampoco pasó desapercibido para el postulante de Unión por la Patria quien llamó a “invertir fuertemente en infraestructura escolar” y fortalecer bachilleratos y escuelas técnicas. Se trata de un plan poco atractivo para Marra. “¡Cómo si crear escuelas fuera fácil!”, comentó antes de redirigir el debate hacia lo que, para él, debe ser la prioridad en términos de inversión educativa: mejorar el salario del cuerpo docente. Salvo una mención efímera, no tocó en absoluto el sistema de vouchers propuesto oportunamente por Javier Milei.
Lucas González, presente
La seguridad no podía estar ausente en este debate. Lo curioso fue, tal vez, el amplio consenso que mostraron los tres candidatos masculinos sobre el rol preponderante que deben tener las fuerzas policiales en la protección de los vecinos. “Para resolver el problema de la inseguridad no es contra la policía, sino controlándola y respaldándola”, afirmó Santoro.
De igual modo, Jorge Macri explicitó que es necesario equiparlos con pistolas táser y complementar su labor con la instalación de “puntos seguros” ─una política que aplicó durante su gestión en Vicente López─ y la identificación del rostro de los delincuentes mediante cámaras de seguridad. “Basta de puerta giratoria”, concluyó.
El fortalecimiento de las fuerzas de seguridad enfrentó una mayor reticencia por parte de Biasi, quien recordó el homicidio de Lucas González, al que catalogó como un crimen con fuerte arraigo en el racismo del cuerpo policial.
ACM
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