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Recesión
Impacto concreto

Tomar Uber, comer chocolate y salidas en pareja, lo que más se ajusta en la era Milei

Uno de los servicios que más cortaron los consumidores, como consecuencia de la crisis de consumo, es el transporte en autos de alquiler.

Alejandro Rebossio

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La mitad de los argentinos nota que su capacidad de consumo está “peor” o “mucho peor” en 2024 respecto del año pasado, según una encuesta a 1.300 personas de 16 a 75 años que elaboró en julio y agosto la consultora Moiguer. Lo que más se ajustó o directamente se eliminó en la vida cotidiana fueron las siguientes actividades:

  • Tomar un taxi, Uber o remise, 91% de los encuestados.
  • Golosinas y chocolates, 86%.
  • Salidas en pareja o con familia, 85%.
  • Compras de primeras marcas de alimentos, 83%.
  • Hacer un asado con familia y amigos, 80%.
  • Ir a tomar un café o helado, 80%.
  • Actividades deportivas, 75%.
  • Servicios de streaming, 68%.
  • Uso del auto o moto, 66%.
  • Servicio del celular, 59%
  • Medicina prepaga, 55%.
  • Uso del transporte público, 54%.
  • Internet en el hogar, 49%.
  • Compra de medicamentos, 48%.
  • Colegio de los hijos, 41%.

Algunas conclusiones del estudio:

  • El 69% considera que sus ingresos crecieron menos que la inflación, que acumuló 87% en los primeros siete meses del año.
  • La mitad (52%) está endeudado, frente al 10% de 2023.
  • El 55% debió usar ahorros para cubrir gastos cotidianos.
  • El 45% sumó horas de trabajo o arrancó un emprendimiento propio para generar más ingresos.
  • Dos tercios (67%) recortó gastos cotidianos. Incluso en el nivel económico alto, el 52% lo hizo. En el medio, el 62% y en el bajo llega al 77%.
  • El 76% de los que meten motosierra a sus gastos, como el presidente Javier Milei, lo hace porque no llega a fin de mes. Un tercio (35%) porque disminuyeron sus ingresos; el 29%, para controlar su presupuesto; un quinto (20%) para hacer erogaciones más importantes; el 15% para resguardarse por la incertidumbre y el 4% para ahorrar.

En este contexto de una recesión cada vez más profunda, Fernando Moiguer, CEO de su consultora, observa que aparecen las empresas que ofrecen “pactos de precios”.

“Las propuestas de pactos de precios comenzaron a proliferar en los últimos meses, impulsadas por marcas y cadenas de supermercados como reacción frente a la baja del consumo. Si bien las marcas cuentan con un amplio conocimiento, su credibilidad y mensaje son en primer lugar, puestas en duda por el consumidor”, afirmó Moiguer.

En julio, de acuerdo con un trabajo específico para estudiar cómo se reciben los congelamientos de precio y otras tácticas que las compañías van tomando, el 68% de los consumidores sostuvo que estas acciones de las marcas son poco o nada creíbles, sostuvo el directivo.

Subrayó que “las palabras oportunismo y engaño son las más elegidas a la hora de representar las propuestas que las compañías ofrecen” y que “si bien se entiende la utilidad del pacto para el bolsillo, se la aprovecha si se puede o se caracteriza como útil”, ya que “lo que se percibe no es cercanía sino engaño y oportunismo”.

“En una época sin fe, en donde la sospecha antecede al impulso y el consumo se torna hiperracional, no se trata de hacerse el amigo, sino en todo caso de intentar acompañar genuinamente. Diarco, Newsan, Día, Carrefour y Nobleza Gaucha, entre otras, lo vienen pescando. Cuando Newsan toma Procter & Gamble y baja los precios de Ariel y Drive, está comprendiendo cómo las marcas de primera son de primera cuando entienden al consumidor. Si se logra ser verdaderamente una ayuda o una oportunidad, cuando la economía mejora, la identidad, el recorrido y el prestigio están listos para construir un vínculo más profundo”, aconseja Moiguer.

Pero en general pocos precios bajan. Así lo prueba el monitoreo de la consultora Equilibra sobre la primera semana de septiembre, cuando debía percibirse el impacto de la rebaja del impuesto PAÍS. Sólo se registraron menores valores en autos y celulares (-1%). En cambio, se encarecieron los insumos y servicios de construcción (0,1%), calzados (0,2%), productos de limpieza (0,4%), autopartes y restaurantes (0,6%), equipos audiovisuales (0,7%), artículos de cuidado personal (1%), electrodomésticos (1,3%), remedios (1,4%) y bebidas alcohólicas (1,6%), entre otras. La inflación semanal fue del 1,2%.

AR/JJD

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